Vacaciones con mascota: el 65% de las familias con animales viaja con ellas, al menos, una vez al año

Las familias españolas valoran cada vez más la compañía de los animales. De hecho, la primera Encuesta de Bienestar Animal en España, realizada en hogares con mascotas y presentada el pasado abril por la compañía veterinaria AniCura, señala que, al menos la mitad de las familias cuentan con una mascota. De ellos, el 41,8% tiene, como mínimo, un gato y el 63%, al menos, un perro. De estos últimos, el 65% afirma viajar, al menos, una vez al año con su mascota.

Playa, montaña, camping, hotel o apartamento, el alojamiento es lo de menos para las personas que viajan con sus animales. Aunque no hay un censo oficial de lugares que admiten mascotas, con una simple búsqueda en internet es fácil encontrar más de 500 hoteles y apartamentos 'pet-friendly' (es decir, que admiten mascotas) en Aragón.

Fuera de la Comunidad también los hay. Los zaragozanos María Vázquez y su pareja, Javier Gómez, hace tres años que van de vacaciones con sus dos perros. "Zar y Titán son dos más en la familia. A todos nos apetece que estén con nosotros durante las vacaciones, si no sentiría que me falta algo", cuenta ella. En su caso, buscan siempre casas grandes con jardín para que sus dos perros puedan jugar y correr. "También nos sirve a nosotros para despreocuparnos por si algún día estamos algún rato más largo fuera de casa, no estar pensando en que los pobrecitos están encerrados", explica María.

Durante los primeros años de los canes, los dejaban con su familia, veraneando en un chalet que tienen en La Muela. Decidieron llevarlos con ellos por primera vez hace tres veranos: "Desde entonces, los llevamos con nosotros todos los años. No me sentiría a gusto volviendo a dejarlos en casa mientras nosotros estamos de vacaciones". 

Esta pareja no se ha planteado llevar a sus mascotas a una residencia o guardería por el "delicado carácter de uno de los perros" y, también, porque ambos toman diferentes medicaciones. "Sé que quienes regentan ese tipo de guarderías son profesionales, pero creo que no estaría del todo tranquila", añade.

Zar durante sus vacaciones en Moraira, Alicante.

No es el caso de Teresa Pérez y Fernando Guzmán. Ellos, cuando no han podido llevar a sus dos perros de vacaciones, los han dejado con una cuidadora. "La experiencia siempre ha sido buenísima. Incluso hemos repetido", cuentan. Aunque añaden: "Siempre que podemos, intentamos llevarlos con nosotros de vacaciones o de escapada, salvo que implique un vuelo, que entonces los dejamos con familiares que también tienen perro".

Una de sus mejores experiencias con mascotas ha sido en Picos de Europa, en Cantabria. "Fuimos al camping El Carés, que permite animales siempre que estén atados y al día de sus vacunas", explica ella. También han ido de escapada a un pueblecito de Teruel. "En ese caso, fuimos a un hotel que admitía perros. Lo único que no nos gustó es que al llegar nos informaron de que, aunque habíamos pagado un suplemento por el perro, no nos daban ningún tipo de facilidad, ni una manta, ni un comedero, nada", explica. Y añade que: "Lo único que cambiaría de estos alojamientos es que si piden un suplemento sea para algo, no para poner pegas o no dar servicios extra".

Lía y Tino con sus dueños, Teresa y Fernando, durante una escapada a Almonacid de la Cuba.

Un ejemplo de alojamiento que admite animales es el Hotel Arabia, en Albarracín (Teruel). Allí llevan una década admitiendo mascotas, y reconocen que es una tendencia al alza. "Nuestros clientes vienen aquí con su mascota porque es un miembro más de su familia", explica el responsable de dirección, David Almazán.

"A los que vienen con su perro o gato les ofrecemos habitaciones más amplias. Cobramos cinco euros más de suplemento, que después donamos a una protectora local", añade. Cuenta también que nunca han tenido problemas con el resto de los clientes por permitir mascotas en el hotel, donde se agudizan las tareas de limpieza, sobre todo, en las habitaciones en las que ha habido animales.

Ellos también pueden tener sus propias vacaciones

Happy Dogs, en Alfajarín (Zaragoza), es una de las más de diez residencias caninas que hay en Zaragoza. Su ubicación, de camino a las costas de Cataluña y Valencia, es estratégica para que los propietarios dejen allí a sus mascotas.

"Tenemos 75 habitaciones individuales. Todas disponen de parque individual, además de cientos de metros de parque de sociabilización, donde unos perros salen a jugar con otros", explica el gerente de Happy Dogs, Jesús Alós.

Allí se les suministra hogar, comida y cuidados, por 18 euros al día, con la única condición de que los canes tengan su pasaporte, microchip y cartilla de vacunación en regla.