La campaña de riegos cierra con pérdidas de hasta 60 millones de euros por la sequía

La sequía ha sido la protagonista durante esta campaña de riegos, dejando pérdidas de unos 60 millones de euros, como estima la Comunidad de Regantes del Canal Imperial de Aragón y Cataluña. Los malos resultados se han debido a la imposibilidad de realizar segundas cosechas. La campaña ha estado marcada por las restricciones y los prorrateos, lo que ha hecho que los regantes tan solo hayan podido disponer de un 70% del agua de otros años. El resto de comunidades de Aragón tuvieron que optar por cultivos menos rentables y ven con preocupación el inicio del nuevo año hidrológico por la mala situación de los embalses.

"Ha sido la peor campaña de riegos de la historia de Bardenas", asegura José María Vinué, presidente de la Comunidad General de Regantes del Canal de Bardenas. La misma situación se repite en otras zonas de la Comunidad, porque la lluvia de la primavera llegó tarde y obligó a establecer cupos.

"No tuvimos precipitaciones hasta mitad de junio. ¿Qué pasó? Tuvimos unos meses de marzo y abril con temperaturas inusualmente altas y eso hizo que la demanda para regar el cereal de invierno fuese muy alta. Los consumos de marzo y abril han sido récord de toda la historia", explica José Antonio Pradas, presidente de Riegos del Alto Aragón. 

Las altas temperaturas han condicionado los cultivos de verano

También la falta de humedad ha afectado a los cultivos de verano. En Bardenas se dejó de sembrar hasta un 11% de arroz y maíz; en el Alto Aragón, hasta un 40%, y los regantes del Canal de Aragón y Cataluña calculan pérdidas de 60 millones de euros porque tuvieron que autolimitar las segundas cosechas.

"Los cultivos de verano son los que, normalmente, en una explotación de regadío, más valor añadido tienen, ya que les permite mantener esos gastos que conlleva el regadío y esas inversiones de modernización y maquinaria que ellos hacen", apunta Vinué.

En el Alto Aragón muestran preocupación por los costes: "Los de producción se han disparado, el tema de la energía nos preocupa y si ahora añadimos a eso que los precios de lo que vamos a vender están muy por debajo de lo que estaban el año pasado, es motivo de muy honda preocupación", certifica Pradas. 

Ahora están pendientes de que en el otoño y en el invierno aumenten las reservas de agua para asegurar una nueva campaña. Hasta entonces, los regantes aprovechan para hacer obras de mantenimiento en sus acequias y canales.