La producción de energía hidráulica en Aragón se reduce a la mitad por la sequía

La sequía que sufren los embalses de Aragón también tiene como consecuencia la caída de la producción de electricidad procedente de la energía hidráulica. En el primer semestre del año, la energía producida se ha reducido a la mitad en la Comunidad, donde se produce el 20% de toda la generación eléctrica en España. A lo largo del territorio aragonés hay más de 150 centrales hidroeléctricas, ubicadas de manera mayoritaria en la provincia de Huesca. 

Aragón, junto a otras cuatro comunidades, genera más del 80% de toda la producción hidráulica del país. Una producción que se ha visto afectada por la ausencia de lluvias y la reducción de las reservas de agua de los embalses. "En el primer trimestre del año hemos observado que hemos producido entre el 5 y el 20% menos de energía y en el mes de julio todavía se agudiza más. Hemos producido un 40% menos que en el mismo mes del año pasado", explica el jefe del Área de Energías Renovables de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), Luis Morales. 

Además, en situaciones de escasez de agua, esta no se destina siempre a la producción de la electricidad. "Hay otras prioridades. Puede ser el abastecimiento del agua para personas, el caudal ecológico, la necesidad de riego... Es decir, hay otras circunstancias que van a estar por delante de la producción eléctrica", señala el subdirector de Infraestructuras de la Escuela de Ingeniería y Arquitectura de la Universidad de Zaragoza, Enrique Cano. 

Los expertos en eficiencia energética consideran que la fuente hidráulica tiene muchas ventajas al ser barata, limpia y poder adaptarse a la demanda, pero subrayan que es necesario un equilibrio con los costes medioambientales.