El buen tiempo acompaña a los esquiadores que han estrenado la temporada en el Pirineo aragonés

Un buen número de esquiadores se han acercado este sábado hasta alguna de las estaciones del Pirineo aragonés para disfrutar de la primera jornada de apertura de las pistas. Formigal-Panticosa, Cerler, Astún y Candanchú han abierto sus puertas este fin de semana, iniciando la temporada del deporte blanco en la provincia oscense. Entre todas, han ofrecido más de 50 kilómetros esquiables que ya han disfrutado los primeros deportistas, en una jornada marcada por el buen tiempo y el sol.

En la inauguración no ha habido grandes aglomeraciones, algo que han agradecido los que no han querido perdérsela. "No hay mucha gente y la nieve está muy bien”, comentaba uno de los deportistas. También había mucha ilusión entre el personal de la estación y el propio grupo Aramón, que comienza una temporada con muy buenas expectativas y con el 70% de su plantilla ya incorporada.

La apertura temprana y una Semana Santa que se celebra antes auguran que podrán cumplir el objetivo de superar el millón de visitantes. Además, en el horizonte, el propósito de la unión de estaciones para mejorar la competitividad. "En toda Europa y en Estados Unidos los dominios ya tienen que ser grandes. El mundo está moviéndose en esa dirección. Y la verdad es que tenemos una oportunidad fantástica de hacerlo bien, de hacerlo sostenible. Tenemos una posibilidad tremenda en Aragón de mantener un dominio esquiable que compita de tú a tú con los internacionales", ha asegurado Antonio Gericó, presidente de Aramón.

Un movimiento que, aseguran desde la organización, les permitirá además ampliar el número de visitantes entre semana, lo que repercutirá no solo en las estaciones, sino en toda la economía que generan. Según las estimaciones del grupo, el 80% del dinero gastado por los esquiadores se queda en restaurantes, hoteles y comercios.

Y en el valle del Aragón, este sábado también han abierto las pistas de Astún y Candanchú, en una mañana ideal para deslizarse por la nieve, con sol y poco viento. En conjunto, 35 kilómetros esquiables con espesores de hasta 40 centímetros. Estas condiciones y las ganas de los esquiadores han atraído a muchos más aficionados de los que suele haber este fin de semana de diciembre. Una buena noticia cara a las previsiones de estas navidades.