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SEGURIDAD VIVIENDA

Humedades, grietas o ruidos en la estructura de un edificio, primeros síntomas para avisar a un técnico

Aragón cuenta con un parque de 300.000 edificios y el 10% presentan problemas de seguridad, la mayoría leves. La primera Inspección Técnica (ITE) obligatoria se hace a los 50 años y luego, en Zaragoza y Huesca, cada diez años

ARAGÓN NOTICIAS /
Un técnico revisando un edificio. / Canva.
icono foto Un técnico revisando un edificio. / Canva.

La aparición en una pared de una fisura que acaba convirtiéndose en una grieta, o un ruido raro en la estructura son señales suficientes para avisar a un técnico que revise la situación de un edificio de viviendas. En el caso del edificio derrumbado en Teruel fueron los propios vecinos los que alertaron primero de fugas de agua y, el mismo día del colapso, de ruidos en el edificio. Algo que provocó el desalojo inmediato y pudo salvarles la vida.

Aragón cuenta con cerca de 300.000 edificios (mucho de ellos unifamiliares en el medio rural) y, según el Colegio de Arquitectos y Aparejadores Técnicos de Zaragoza (Coaatz), el 10% presentan problemas de seguridad. "Muchos de esos problemas son menores, como una antena mal colocada o unas tejas que se han caído", indica Lucio de la Cruz, gerente del Coaatz, quien destaca cuándo sí hay que adoptar medidas más serias: "Cuando oímos un ruido o un crujido raro en una estructura de hormigón, que es de lo que están hechos la mayoría de los edificios, es cuando nos tenemos que preocupar, así como cuando una fisura se ha convertido en una grieta". 

Es en ese momento, apunta el experto, cuando hay que avisar. "Es preferible que vaya un técnico y confirme que esa grieta se debe a una dilatación o a un asentamiento del edificio, que es lo que solemos ver con cierta facilidad". 

Como si de la ITV de un coche se tratara, las viviendas deben pasar la Inspección Técnica de Edificios (ITE). Por norma general, se pasa, de manera obligatoria, a los primeros 50 años. Los municipios también pueden regularlo y, por ejemplo, en Huesca y Zaragoza establecen que se pase también cada diez años. 

Una labor que realizan, fundamentalmente, aparejadores y arquitectos técnicos, pero también arquitectos. "Nosotros hacemos en torno al 70% u 80% de las ITE del mercado", apunta De la Cruz, quien, al mismo tiempo, detalla que en 2020 en Zaragoza realizaron 1.232 inspecciones, en 2021, unas 960, y el año pasado, 455. "Hubo muchas revisiones en 2020 porque se dio la circunstancia de que ese año tocó a muchos edificios anteriores a 1960 hacer la revisión de los diez años", subraya en gerente de Coaatz.

Por su parte, Marta Arzubialde, gerente en el Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Huesca, resalta que en 2020 se hicieron en la capital oscense 33 inspecciones, en 2021, casi 40, y en 2022, solo 10, algo que achaca a la reciente implantación del Libro del edificio existente, un manual de uso y mantenimiento de edificios, y que, señala, "falta consolidar". 

Lo que se ve en una inspección

Cuando un técnico acude a revisar un edificio observa múltiples detalles que, habitualmente, pasan desapercibidos para la mayoría. "Es como si viéramos a través de un equipo de rayos X y comprobamos cómo está la cimentación, los tabiques, las cornisas, las tuberías de saneamiento, etc. Como si fuera un paciente, tratamos de identificar la sintomatología, ver posibles problemas, y aconsejamos un tratamiento", explica el experto. 

Solo se registran las ITE favorables, y en caso de que un edificio no la pase, los técnicos hacen un informe y recomiendan una serie de acciones a adoptar por parte de la comunidad de vecinos. "Si un edificio no tiene la ITE, es como si circularas sin seguro, y si pasa algo los propietarios asumen las posibles responsabilidades", comenta Lucio de la Cruz.

Algo en lo que incide Arzubialde: "Cuando salió la ordenanza en Huesca se mandaba carta a los propietarios informando de que tenían que pasar la ITE, ya que el deber de mantenimiento es del promotor, de los propietarios, y si no se pasa puede acarrear una sanción". 

La mayoría son seguros

Sobre el edificio derrumbado en Teruel, el gerente del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Zaragoza asegura que los colapsos "suelen darse en edificios muy antiguos y en mal estado" y que es algo que ocurre en "contadísimas" ocasiones.

Al mismo tiempo, recomienda estar "tranquilos". "En España se construye muy bien desde los años 70, es uno de los países donde más seguros podemos estar en cuanto al nivel de construcción", y concluye que lo ocurrido en Teruel es "muy extraordinario".