El carburante supera los 1,73 euros y pone contra las cuerdas al sector del transporte

El precio de los carburantes sigue al alza y ha marcado un nuevo récord en este último mes. En concreto, la gasolina se sitúa en los 1,73 euros por litro, su valor máximo en lo que va de 2023 y el más alto desde finales de noviembre de 2022. A esto se suma que entonces estaba vigente la subvención de 20 céntimos por litro, implantada por el Gobierno por la crisis por la guerra en Ucrania. Una situación que pone contra las cuerdas al sector del transporte y de la logística en Aragón, donde algunas empresas se plantean, incluso, cerrar: "Estamos trabajando en pérdidas", lamenta el presidente de Tradime, José Antonio Moliner.

"Hoy en día todas las empresas de transporte tienen indexadas las tarifas a los precios de los combustibles. Es decir, cuando sube la gasolina, sube la tarifa. El problema es que estas indexaciones son mensuales y, entre que se hace la subida y se ajusta el precio puede pasar un tiempo. Sin embargo, el sobrecoste afecta mayoritariamente al resto de la cadena y, en definitiva, al consumidor", explica el gerente del Clúster Logístico de Aragón, Ángel Gil. 

Ante esta situación, muchas empresas del sector han optado por asegurar más el trabajo, ajustar costes y hacer menos inversiones. Una actuación provocada por la huelga del transporte de hace un año, que puso en jaque a transportistas y empresas durante meses. "A todo esto se suma un gran problema y es que cada vez más profesionales dejan el oficio. No solo son los que lo dejan, sino que la tasa de reposición es prácticamente nula. A futuro, el problema va a ser mucho peor. Cada vez habrá menos conductores, habrá que pagarles más y eso volverá a repercutir en los precios", afirma Gil. 

El coste medio de los carburantes ha encadenado varias semanas consecutivas de subidas y acumula un encarecimiento de un 12%. El precio de la gasolina ha subido más de un 8% desde principios de julio y alcanzó su pico a finales de agosto, en plena operación retorno del verano. En el caso del diésel también registra una subida hasta los 1,612 euros el litro, su nivel más alto desde el pasado febrero. No obstante, cabe recordar que los máximos de ambos carburantes se produjeron hace más de un año, cuando en julio de 2022 la gasolina alcanzó los 2,141 euros y el gasóleo los 2,1 euros. 

"Prefiero vender los camiones y la empresa"

Desde la Asociación Empresarial de Transportes Discrecionales de Mercancías de Aragón (Tradime) han calificado la situación actual de "muy negativa" para los transportistas y han denunciado la especulación "salvaje" que ha provocado el encarecimiento de los combustibles. Los transportistas han tenido que aplicar un aumento de las tarifas para compensar el gasto en combustible pero, aun así, no salen las cuentas. "Hay menos trabajo, se están parando fábricas grandes como Stellantis, donde cada día entran 350 camiones, y a esto le sumas un coste cada vez más alto de los carburantes", indica el presidente de Tradime, José Antonio Moliner. El aumento del precio de los carburantes no es un hecho aislado: "Un camión puede valer 140.000 euros solo la tractora; los neumáticos han subido un 20% y, cada mes, yo meto 6.000 euros de combustible al camión".

Moliner lleva 40 años como transportista y se plantea aparcar el camión si la situación sigue como hasta ahora. "Hemos notado un bajón muy fuerte en el trabajo respecto a hace un año. Hay menos viajes y, por supuesto, menos dinero. Estamos en un punto crítico y vamos a tener que cerrar. Estamos trabajando en pérdidas y prefiero vender los camiones y la empresa. Y no solo yo, así estamos muchos", agrega. Además, señala que esta problemática lo sufren tanto los autónomos como las grandes empresas de logística: "Es algo generalizado. El que tiene un camión tiene un problema, el que tiene 100 tiene 100 problemas".

Una subida que afecta al precio de los alimentos

La subida en el precio de los carburantes provoca el aumento de los costes del transporte de mercancías y, consecuentemente, del precio de los alimentos. Desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) han exigido al Gobierno aumentar de manera "urgente y sustancial" el importe del cheque de 200 euros para familias con ingresos menores a 27.000 euros, así como el número de beneficiarios, aumentando a su vez los límites de ingresos para hacer frente a esta situación. 

De igual modo, la OCU ha pedido que el IVA del 0% se aplique a la carne y al pescado, las principales fuentes de proteínas. Al mismo tiempo, ha solicitado un esfuerzo combinado a toda la cadena alimentaria para tratar de buscar soluciones que contribuyan a reducir los precios de los productos básicos.