Las residencias privadas cuestionan la eficacia de las PCR cada 72 horas

El colectivo de residencias privadas de Aragón advierte de la dificultad que, para el sector, supone realizar una PCR cada 72 horas a aquellos de sus trabajadores que no están vacunados, por lo que cuestiona este método aprobado por el Gobierno de la Comunidad, para asegurar que no se produzcan nuevos contagios entre los residentes. Así lo ha denunciado este miércoles Carmen Torrijos, vicepresidenta de ARADE (Asociación Aragonesa para la Dependencia), en el programa 'Despierta, Aragón', de Aragón Radio.

“La verdad es que la vacunación en los trabajadores de residencias ha sido muy alta en Aragón y en toda España, pero por parte de quienes no han querido vacunarse, tenemos un problema con las pruebas que hay que hacer cada 72 horas”, ha explicado. Para Torrijo, implantar con eficiencia estas medidas en el sector resulta "muy complicado", no solo por coste o resultados, sino por la influencia hacia los residentes: “El malestar que se va a crear dentro de la residencia influye a nuestros residentes… no es fácil aplicar según qué medidas”., ha sentenciado.

Torrijo ha añadido que no debe olvidarse que las residencias "forman parte de la sociedad y que, por muchas restricciones que se pongan en la residencia, si no nos cuidamos fuera, el virus entra”. “Continuamos con una calma tensa desde la vacunación y estamos muy expectantes respecto a lo que está ocurriendo, porque todo lo que ocurre en la sociedad, afecta a la residencia. No podemos poner una puerta y decirle a la infección que no entre”, ha añadido.

Desde el Departamento de Ciudadanía y Derechos Sociales recuerdan que los empleados sin vacunar que no quieran hacerse estas pruebas van a recibir un requerimiento de advertencia de procedimiento sancionador, tal y como recogen las instrucciones que fueron remitidas a los centros. 

A esta medida, el Ejecutivo aragonés añade una resolución con una serie de recomendaciones para las residencias de mayores, ante el aumento de contagios, como pedir que no se produzcan visitas de familiares que no estén vacunados o mantener los grupos burbuja dentro de los propios centros.