BonÀrea abrirá este año una nueva nave de tostado de frutos secos en su complejo de Épila

Antes de final de año, BonÀrea abrirá una nueva nave donde se tostarán frutos secos en su complejo logístico de Épila. En este momento, hay otras tres naves operativas: de talleres de mantenimiento, de logística y para el lavado de cajas. El grupo catalán ha invertido 200 millones de euros en unas instalaciones donde se prevé que trabajen 4.000 personas.

Por el momento, BonÀrea está cumpliendo los plazos que se marcó para finalizar su complejo en la localidad zaragozana. El presidente de Aragón, Jorge Azcón, ha visitado la empresa que pronto incorporará una nueva nave de tostado de frutos secos. Casi al mismo tiempo empezará a construir la zona de líquidos, donde envasarán leche. La demanda de este producto ha aumentado y las instalaciones que la compañía tiene en Guissona (Lleida) se han quedado pequeñas. “Necesitamos tener una siguiente línea y es más correcto tenerla aquí por el tema del transporte, para llevarlo a todas las tiendas de esta zona”, ha explicado Andreu Puig, director de Ingeniería de BonÀrea.

El presidente de Aragón durante su visita al complejo de BonÀrea en Épila.

Este año se puso en marcha también una nave logística que sirve a 100 tiendas y la inversión ha aumentado en los últimos meses. En abril, rondaba ya los 170 millones de euros y actualmente alcanza los 200 millones, la mitad de lo previsto por la empresa. “Ya hay ochenta personas trabajando y es verdad que alguna de las naves y alguna de las plantas se van a poner en marcha de forma inminente. Eso supondrá la creación de nuevos puestos de trabajo y por eso es evidente que desde el Gobierno de Aragón vamos a seguir apoyando a BonÀrea”, ha subrayado Jorge Azcón.