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SUCESOS

Este viernes quedará visto para sentencia el juicio contra la banda que desfiguró la cara a un joven en Caspe

Los acusados, que se enfrentan a penas de hasta 15 años de prisión, tendrán este viernes el turno de última palabra. La defensa del presunto autor material pide la absolución por indefensión

ARAGÓN NOTICIAS /
Este viernes será el turno de última palabra para los seis acusados. / CARTV
icono foto Este viernes será el turno de última palabra para los seis acusados. / CARTV

El juicio contra la banda acusada de desfigurar con ácido la cara de un joven de 17 años en Caspe quedará este viernes visto para sentencia. Los seis acusados se enfrentan a penas que van hasta los 15 años de prisión que se piden para los presuntos autores intelectuales. Por su parte, solicitan 14 años de cárcel para el principal acusado por arrojar el ácido, a quien se imputan delitos de tentativa de asesinato, lesiones y pertenencia a grupo criminal. Sus defensas piden para ellos la absolución por indefensión.

Este viernes será el turno de última palabra para los seis acusados. En todo el procedimiento no ha sido posible escuchar al principal acusado, Aitor Gordillo, que el primer día no declaró y renunció a su letrado por pérdida de confianza. Sin embargo, sí le ha representado durante el resto de sesiones, en las cuales ha solicitado su absolución por indefensión.

A Kamal, la víctima, el  ataque con ácido le ha provocado severas lesiones en cara, tórax, mano y codo. Además, los vapores del líquido le taponaron las vías respiratorias. Si salvó la vida, ha asegurado este jueves la fiscal, fue porque sus hermanos le auxiliaron de inmediato: "Si no se hubiera intervenido habría muerto". El ministerio público ha mantenido en esta sesión del juicio la acusación por tentativa de asesinato. "Los hechos son muy graves", ha incidido.  

Para la Fiscalía hay cuatro responsables. Entre ellos, el sicario, presunto autor material de unos hechos por los que habría recibido 500 euros. También incluye a una mujer como cómplice del suceso por aportar datos del adolescente y a dos miembros del clan Giménez. Según la fiscal, la motivación sería vengarse de su marido por divorciarse y no regresar a España. Además de las penas de cárcel por el ataque que casi le cuesta la vida, reclama para el joven más de medio millón de euros de indemnización.