Publicidad
8M, DÍA DE LA MUJER

Vanesa Castán, la ingeniera que aúna feminismo y urbanismo para luchar contra el cambio climático

La altoaragonesa ha sido reconocida a nivel internacional por su contribución feminista en el método científico

ARAGÓN NOTICIAS /
icono foto Vanesa Castán (izq) es una altoaragonesa premiada por sus contribuciones a la ciencia y al urbanismo.

La presencia femenina en las carreras de ciencias se va incrementando progresivamente en España. No ocurre lo mismo en las ingenierías, donde son alrededor del 23% del alumnado. Hace 20 años, la altoaragonesa Vanesa Castán era de esa minoría de chicas que se licenciaba en Ingeniería de Montes. Hoy, es catedrática en el Reino Unido y sus investigaciones, reconocidas por Naciones Unidas. Ella aplica los principios del feminismo al urbanismo para lograr ciudades más habitables frente al cambio climático.  

Sus orígenes pasan por la localidad de Bailo, en la comarca oscense de La Jacetania, lo que le influyó para estudiar Ingeniería de Montes en Madrid. Ahora, dos décadas después, Vanesa Castán es más consciente del machismo que vivió y del que todavía existe en la ciencia: "Un ejemplo es el campo científico, donde las mujeres tienden a estar un poco excluidas de la investigación. No se les dan las mismas oportunidades".

Actualmente, vive en Sheffield, donde es Catedrática en Urbanismo Climático y reconocida activista como geógrafa feminista. Entre sus reivindicaciones está la perspectiva feminista en el método científico para afrontar retos globales.

"La respuesta al cambio climático tiene que ser feminista, en el sentido de que sea una respuesta que reconozca la vulnerabilidad y la desigualdad, y que incluya muchas voces, especialmente la de la gente más marginada y que sufra más", indica, al tiempo que lanza una pregunta: "¿Qué significa tener un urbanismo feminista? Cuando miramos la ciudad desde la perspectiva feminista, tenemos que entender que la ciudad que funciona para la persona más marginada, es la ciudad que funciona para todos. No se pueden construir ciudades de mayorías".

Una teoría que ha puesto en práctica en la ciudad filipina de Iloílo, donde las mujeres crean grupos que ahorran para comprar la propiedad de la tierra y construir casas estables. Allí tuvo la oportunidad de conocer de primera mano la labor de este proyecto, premiado a nivel internacional y que propone otro modelo de ciudad, una que se plantea entre todos y no solo por expertos.