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CUIDADOS PALIATIVOS

Unas 3.500 personas requieren cuidados paliativos cada año en Aragón

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), solo el 14% de las personas que necesitan atención paliativa la reciben

ARAGÓN NOTICIAS /
icono foto En el Hospital San Juan de Dios de Zaragoza hay Unidad de Cuidados Paliativos.

Alivian el dolor, mitigan el sufrimiento y ayudan a los familiares de los pacientes. Los cuidados paliativos son una rama esencial de la salud dentro de la etapa más delicada de la vida. Alrededor de 3.500 personas en Aragón son susceptibles de recibir una atención integral que les acompaña durante la última etapa de una enfermedad en la que ya no tienen opciones. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que anualmente en el mundo 40 millones de personas necesitan cuidados paliativos, pero solo el 14% de ellas los reciben. 

"No quieres ver que esa persona al final se va a marchar"

Daniela tenía 41 años cuando los doctores le dijeron que se habían agotado las opciones de responder a la evolución del cáncer. Fue entonces cuando ingresó en Cuidados Paliativos, la unidad encargada de atender y acompañar a pacientes y familiares. Un último mes que atravesó de la mano de su marido. "Al principio aquí vienes sin entender nada, no sabes por qué te han traído, no quieres ver que esa persona al final se va a marchar", relata el José Ignacio Morales, viudo de Daniela. Él explica que pasó por varios estados, experimentando todo tipo de emociones durante el proceso: "Al principio tienes enfado e ira y te preguntas por qué te está pasando a ti siendo tan joven. Después hay otra etapa que es la de bajar los hombros y asumir que lo que tenga que pasar, pasará. Y luego, con cualquier dolor, pensaba que yo también podía tener cáncer. Unos días no tienes ganas de levantarte de la cama y otros te levantas con una falsa euforia".  

'Acompañamiento', la palabra que mejor define los cuidados paliativos

En Aragón, más de 3.000 personas requieren de cuidados paliativos cada año. Para María González, médico de la Unidad de Cuidados Paliativos en el Hospital San Juan de Dios de Zaragoza, la palabra que mejor define los cuidados paliativos es 'acompañamiento': "Nosotros les acompañamos con lo que sabemos de medicina y ellos con los cuidados que pueden practicar. Con todos los cuidados y medicaciones que les decimos que tienen que administrar. Trabajamos guiados por los valores y deseos del paciente, siempre que se pueda". 

Asistencia domiciliaria y hospitalaria

Desde la Unidad de Cuidados Paliativos se le brinda al paciente la posibilidad de recibir una atención domiciliaria. "Se da un trato muy cercano. Ayudas mucho a la familia, que son el soporte que tiene el paciente. Los tienes que empoderar para que puedan hacer ese cuidado en el domicilio", apunta González. Otra manera de acompañar muy necesaria, insiste la médico, es el soporte hospitalario "porque la familia tiene que descansar".  

Tan importante o más que el plano clínico es el psicológico. Asimilar una marcha, una pérdida o lidiar con un duelo tras esa muerte. La psicóloga del equipo de Atención Psicosocial del Hospital San Juan de Dios, Pilar Aguirán, explica que su trabajo consiste en intentar que el paciente acepte su situación y se adapte también a muchas pérdidas, como dejar de andar, la vida social y laboral o usar pañal. "Son duelos que sufren antes del fallecimiento", explica esta profesional. 

El viudo de Daniela se emociona al recordar el trato que recibió de Pilar Aguirán, no solo mientras su mujer estaba en el hospital, también durante el duelo tras el fallecimiento: "Tengo que agradecer ese apoyo que me dio. Porque a mí me explicó perfectamente lo que estaba pasando y me dio las herramientas para seguir adelante y poder levantarme. Es un apoyo tremendo, me enseñó qué me estaba pasando". 

Enseñar a seguir adelante es uno de los objetivos principales de estas asistentas paliativas. Morales insiste en la necesidad de que las administraciones inviertan más en las instituciones dedicadas a este tipo de atención psicológica y sanitaria, para que alguien que pase por el mismo proceso, pueda contar con la ayuda de unos profesionales que como a él, le enseñen a afrontar la pérdida y a seguir viviendo.