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GASTRONOMÍA

Sushi, ramen o gyozas, los platos japoneses que han conquistado los estómagos de los aragoneses

El auge de la comida japonesa (y de la asiática en general) tiene su reflejo en la cantidad de negocios de gastronomía nipona que hay, por ejemplo, en Zaragoza

ARAGÓN NOTICIAS /
Tres personas comen sushi. / Canva
icono foto Tres personas comen sushi. / Canva

El ramen es el último grito en gastronomía; no en vano, en Zaragoza, por ejemplo, han abierto varios restaurantes dedicados a esta sopa japonesa. Una oferta que triunfa especialmente entre los jóvenes, que, atraídos por la cultura nipona de las películas y series, buscan adentrarse también en sus costumbres. "Se nota la influencia de los dibujos, el manga... Los jóvenes están muy interesados en Japón a todos los niveles y la comida es uno de ellos", señala la japonesa Kumiko Fujimura, presidenta de la Asociación Cultural Aragón-Japón.

Con el cambio de siglo, los hermanos Guan y Luis Qiu abrieron su primer restaurante en Zaragoza, el conocido Sakura -flor de cerezo en Japón-. Buscaban acercar su cultura a los aragoneses y eligieron hacerlo a través del estómago. La pandemia golpeó su negocio de hostelería, acabando con sus locales, pero la curiosidad que despertaron en la ciudadanía sigue viva y prueba de ello es la cantidad de restaurantes japoneses que han abierto sus puertas en los últimos años, sobre todo en el centro de la capital aragonesa, donde hay más de una decena.

"De repente, hay muchos locales. Últimamente, hay muchos de ramen", asegura la japonesa afincada en Zaragoza desde hace más de 30 años. Aunque asegura que no hay cocineros oriundos en los restaurantes especializados en la comida de su país, mantiene que la calidad de los platos es buena. 

Los ingredientes, distintos a los típicos en esta tierra, son un reclamo más para los aragoneses que buscan nuevas experiencias gastronómicas. "Se tiene la imagen de que es una comida más saludable porque no utiliza casi aceite, es todo más natural y los ingredientes, como la soja, algunas verduras o las algas, no son muy comunes aquí", apunta Kumiko Fujimura.

El ramen, lo más buscado

Un argumento que comparten en el espacio culinario La Zarola, ubicado en el centro de Zaragoza. Entre los cursos de cocina que imparten, los asiáticos son los que más tirón tienen desde su apertura hace ya nueve años. "El de ramen es el que más gusta, aunque cualquiera de comida japonesa, tailandesa..., tienen muy buena acogida. Quizá porque hay platos que no son tan fáciles de encontrar o consumir, aunque cada vez hay más oferta, y la gente quiere aprender a cocinarlos para poder probarlos", comenta Sara Acero, fundadora de La Zarola.

La conocida como sopa de fideos japonesa requiere de mimo y buenos ingredientes para un resultado óptimo. El caldo, base de la preparación, se suele hacer con huesos de pollo, puerro verde, ajo, jengibre, cebolla y zanahoria, aunque también puede añadirse pasta miso -preparado para caldo-.

La salsa, parte indispensable de este plato, es la clave del sabor, que se consigue con la unión armónica de la salsa de soja, el mirin -condimento-, sake, jengibre, ajo, puerro y kombu -tipo de alga-.

Los ingredientes principales deben incluir siempre fideos o tallarines, a los que se suele sumar huevo duro -no muy hecho-, chuleta de cerdo empanada, conocida como tonkatsu; cebolleta y naruto, una especie de surimi.

Ramen. / Canva

Basta con echar un vistazo a su web para corroborar que la comida procedente de Asia está de moda. En lo que queda de mes no hay ni un solo hueco libre para poder asistir a los talleres temáticos de comida japonesa, ramen, sushi, bocados asiáticos o comida tailandesa. "Mucha gente viene sin saber cocinar esos platos o bien, habiéndolo intentado y fracasado", dice Acero. 

Los pinches más comunes en estos cursos son personas de entre 35 y 50 años, apasionados de la gastronomía y con ganas de aprender nuevas recetas, como las gyozas -empanadillas japonesas-, el okonomiyaki -masa con varios ingredientes cocinados a la plancha- o el curry. 

Por contra, el sushi tiene adeptos en los restaurantes, pero no tanto en los cursos de cocina, ya que se ha popularizado tanto, que ya no llama la atención. Con todo, para los fanáticos de esta preparación, La Zarola oferta talleres de iniciación y otros más técnicos para los más versados en la materia.