Siete meses después del decreto de ahorro energético: ¿Las facturas se reducen? ¿Hay inspecciones?

Se cumplen ahora siete meses desde que entró en vigor el decreto de ahorro energético del Gobierno central, con el objetivo de reducir un 7% el consumo de gas. Desde entonces, además de apagar los escaparates por la noche (a partir de las 22:00 horas), los comerciantes y hosteleros están obligados a limitar el termostato y a colocar cierres automáticos en las puertas de sus establecimientos. Pero ¿realmente funciona? ¿Se han reducido las facturas? ¿Se están realizando inspecciones?

En las calles de Zaragoza, hay negocios que todavía no saben si se ajustan a la normativa. Rosa Sánchez es propietaria de una zapatería en el centro de la ciudad. Explica que antes de cambiarla esperan que en alguna inspección, que todavía no han tenido, les resuelvan dudas. "Es un gasto importante y nos gustaría saber si lo que tenemos ahora es suficiente", añade. 

La presidenta de la Asociación de Comerciantes de la Zona Centro de Zaragoza, Begoña Abad, se refiere a la temperatura a la que ha de estar el termostato: 19 grados. Explica que ahora toca abrigarse más y poner menos la calefacción. Lamenta que los clientes pasan frío: "Al tener que desnudarse la gente para probarse la ropa, no es lo mismo tener la calefacción a 25 que a 21. Se nota muchísimo y, de hecho, muchos nos dicen que tienen frío". 

Los termostatos deberían estar a 19 grados pero en las tiendas de ropa es un problema. 

En los bares, aseguran que se regula la calefacción y que se cierran más las puertas, pero explican que la mayoría de los establecimientos no han tenido inspecciones. 

El gerente de la Asociación de Cafés y Bares, Luis Femía, se muestra crítico con este decreto. Además, añade: "Podemos decir que ha sido una medida más estética que efectiva. Tenemos serias dudas de que haya tenido una repercusión directa en la limitación o reducción de los precios de la tarifa de la luz en los establecimiento de hostelería"

En el último trimestre del año pasado, el Gobierno de Aragón inspeccionó las instalación térmica de 547 edificios. Cifra en la que no se diferencia cuántos de estos controles responden al nuevo decreto.