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CRECIDA EXTRAORDINARIA

La riada pasa por la Ribera Baja sin afecciones en los cascos urbanos

El 112 y la Unidad Militar de Emergencias vigilarán Gelsa toda la noche, aunque no se espera que el agua entre a las casas

ARAGÓN NOTICIAS / AGENCIAS /
icono foto Cordón de seguridad para proteger el casco urbano de El Burgo de Ebro.

Los municipios de la Ribera Baja del Ebro afectados por la crecida extraordinaria respiran aliviados tras su paso y después de haber comprobado que no ha afectado a la seguridad de sus cascos urbanos, aunque sí a numerosos campos, carreteras e infraestructuras municipales.

Durante esta noche está previsto que la crecida máxima pase por Gelsa, donde llevan preparando el terreno desde el viernes. "Tenemos una mota de defensa del pueblo que va paralela al río, hemos estado reforzando los puntos débiles que por otros años se ha ido viendo que hay problemas. Y, a la par, hemos hecho un pequeño cordón transversal en la zona sureste del pueblo, que nos ha ayudado ahí Gobierno de Aragón", ha explicado su alcaldesa Isabel Álvarez. A pesar de que no se espera que el agua llegue hasta las calles y casas de la localidad, la UME y el 112 permanecerá vigilante durante las próximas horas. 

Los primeros cálculos realizados por el Gobierno de Aragón cifran en 12.0000 las hectáreas de cultivos que quedarán anegados, por ahora, bajo el agua de esta crecida extraordinaria del Ebro. Aunque todavía no han puesto cifra a las pérdidas económicas, ya que van a esperar hasta que termine la emergencia para valorar todos los daños. 

En Pina de Ebro la Unidad Militar de Emergencia ha trabajado de forma constante para achicar el agua de los campos y reducir así el nivel. Las peores previsiones no se han cumplido, aunque un importante dispositivo preventivo ha estado preparado.  "Está todo muy tranquilo, calma ya y esperar a ver porque lo peor se supone que ha pasado ya", ha dicho Mercerdes Abós, alcaldesa de este municipio. Las motas han aguantado a la punta la crecida que ha pasado este miércoles con un caudal de 2.000 metros cúbicos.  Está previsto que el próximo lunes vuelvan a sus casas las 36 personas con movilidad reducida que han sido evacuadas por precaución.

Vicente Royo, alcalde de El Burgo de Ebro, ha explicado que la huerta siempre se anega y son alrededor de 300 y 400 hectáreas de cereales y alfalfa las que se han visto afectadas. Por primera vez en esta localidad el casco urbano se ha defendido con un cordón de refuerzo con gravas ante la duda de que la mota resistiera la presión.


En Quinto de Ebro también son los cultivos los más afectados, unas 1.000 hectáreas en total de la huerta alta, según el alcalde, Jesús Morales. El Ebro ha alcanzado finalmente los cinco metros  y no se esperaba sobrepasar los 5,2, por debajo de los 5,5 de la avenida de 2018 y los 5,85 de 2015. El nivel está estabilizado, unos 2.100 m3 por segundo, una cantidad menor a lo esperado. 

Tampoco en Villafranca de Ebro ha tenido consecuencias la crecida en su casco urbano. De momento 3 carreteras continúan cortadas al tráfico en Novillas, Gallur y Pina de Ebro.

"Empezamos a respirar con un cierto alivio"

El presidente de Aragón, Javier Lambán, junto a la Delegada del Gobierno, Rosa Serrano, y el presidente de la Diputación de Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero, han visitado los municipios de El Burgo, Quinto y Villafranca de Ebro, además de al Puesto de Mando Avanzado instalado en Pina de Ebro.

"Preveíamos riesgos, de lo peor que puede ocurrir en una avenida que es una posible inundación de un casco urbano, que prácticamente eso ya lo podemos dar por descartado con lo cual empezamos a respirar con un cierto alivio. Lo cual no quiere decir que bajemos la guardia", ha dicho Lambán.

Por su parte Rosa Serrano, Delegada del Gobierno en Aragón ha indicado en esta visita la necesidad de "hacer el cauce más amplio y sobre todo drenar de una manera más natural que preserve, dijéramos respetando medios naturales". 

Consecuencias en los barrios rurales

Entre Alfocea y Juslibol alrededor de 3.000 hectáreas de su huerta están afectadas, además de varias explotaciones ganaderas, viviendas y casetas de campo. Los bomberos han realizado más de 500 intervenciones y 200 personas han sido desalojadas de sus casas en los barrios rurales.

En la Cartuja Baja pueden observarse también agua acumulada en los campos, sin embargo los vecinos aseguran que esta riada ha sido menor que la de años anteriores. 

Por su parte en Movera y en el municipio de Pastriz el agua sí ha conseguido entrar en las viviendas y los vecinos desalojados de la urbanización de La Mejana y Torre Urzáiz todavía no saben cuándo podrán volver a sus casas. 

La crecida se estabiliza en Zaragoza capital

El río ha descendido de los 5 metros, después de que este martes sobre las 20 horas alcanzara su caudal máximo, con una altura de 5,52 metros y un caudal de 2.118 m3/s. Durante las horas más críticas, el operativo de emergencias ha controlado la situación y no se han producido graves daños en la ciudad. "En esta ocasión se ha trabajado con más antelación de la que se trabajó en el pasado. Lo cual ha evitado que determinados daños que se produjeron se volvieran a producir", ha manifestado Jorge Azcón, alcalde de Zaragoza.

Este jueves los alumnos del Colegio Jerónimo Zurita podrán volver a las aulas. El Club Deportivo Helios, sin embargo, continuará cerrado, ya que el agua llega hasta la mitad de su puerta

La situación en la capital está controlada, según indican las autoridades, que piden a su vez prudencia y la responsabilidad de todos los ciudadanos.