La elaboración de chocolate, uno de los usos de la lavanda en Teruel

El cultivo de la lavanda gana hectáreas en Teruel, donde comienza la cosecha de estas aromáticas. El verano es el momento idóneo para recogerlas, cuando las flores todavía no han terminado de abrirse por completo. Esta planta aromática se utiliza, sobre todo, para elaborar productos cosméticos y esencias, aunque también se ha introducido en la gastronomía a través del chocolate. 

La lavanda cultivada en la sierra de El Pobo (Teruel) se encuentra a 1.400 metros de altura, que hace que su color sea más lila. La altitud provoca que sea más aromática y también que sus esencias tengan una mayor calidad. "Puede que sea la explotación con lavanda más alta de España porque estamos a 1.400 metros y a estas alturas no suele haber explotaciones. El color de la lavanda es mucho más intenso, que puede deberse al frío, pero esta lavanda es especial", explica el director de operaciones Fundación Térvalis, José Miguel Muñoz.

Sin embargo, aunque el principal uso de esta aromática es la elaboración de productos cosméticos, en algunos obradores también la utilizan como ingrediente gracias a su esencia. "Nosotros siempre intentamos trabajar con productos de Teruel y asociaciones de la provincia. A raíz de esa idea, empezamos a trabajar, a hacer pruebas y a experimentar hasta que conseguimos los que todos buscábamos: un chocolate de aquí, de Teruel, con lavanda de aquí, recogida en Teruel por la Fundación Térvalis", indica Chencho Muñoz, de la confitería Muñoz. Un chocolate lleno de frescura y aromas que se vende en toda España gracias a la venta online.