La Cámara de Comercio de Zaragoza cree que una zona franca sería "un punto de inflexión" para Aragón

El presidente de Aragón, Javier Lambán, pidió el pasado jueves la declaración de una zona franca para el aeropuerto de Zaragoza al Ministerio de Hacienda, con las ventajas fiscales que ello implica. La declaración de esta zona franca supondría ventajas desde el punto de vista tributario y aduanero en mercancías en tránsito, depósito y transformación, según ha indicado el economista de la Fundación Basilio Paraíso de la Cámara de Comercio de Zaragoza, Eduardo Sanz. "Puede marcar un punto de inflexión en el desarrollo económico de Aragón y del valle del Ebro, fundamentalmente para sectores abiertos a la exportación y para el sector industrial", ha afirmado. 

Para el economista, la declaración de esta zona franca puede suponer un antes y un después para toda la zona del valle del Ebro. "No se trata únicamente de que las empresas se instalen aquí, sino que también supone la generación de empresas auxiliares", ha señalado. Esta declaración evidenciaría una ruptura en el sentido tradicional de zona franca, ya que habitualmente suelen ser ciudades con salidas al mar. Sin embargo, Sevilla cuenta con una, y esto implica que Zaragoza no debería tener ningún impedimento para establecer la suya. "Desde hace siglos, el comercio se ha volcado en zonas marítimas, pero es un fenómeno que se encuentra en todos los países, porque supone un motor de promoción y desarrollo", ha concretado Sanz.

Pese a que la decisión final la toma el Gobierno central, el economista apunta a que los argumentos de peso como la dotación económica, el sector productivo y las comunicaciones de la capital aragonesa son innegables. "La existencia de una zona franca en la ciudad representa una de las cuestiones decisivas. Cuando una empresa valora localizarse es importante contar con elementos que impulsan el crecimiento de forma contrastada. Es una oportunidad que no deberíamos dejar de aprovechar", ha destacado Sanz.