Gioconda Belli: "Mi nacionalidad es mía, nadie me va a quitar mi amor por Nicaragua"

Gioconda Belli vive desde hace un año en España. La escritora nicaragüense huyó de su país antes de que el régimen de Daniel Ortega la enviase a prisión como a cientos de sus compatriotas. El pasado mes de febrero, el presidente del país centroamericano le retiró la nacionalidad y le confiscó, junto a otras 96 personas críticas con la situación de Nicaragua, todos sus bienes. Belli es ahora ciudadana de Chile, pero mantiene su amor por la tierra en la que ha vivido la mayoría de sus 74 años de vida. "Mi nacionalidad es mía, nadie me va a quitar mi amor por Nicaragua", ha dicho Belli. 

Estos días, la autora de obras como 'La mujer habitada' visita Zaragoza. Este viernes, en una entrevista en el programa 'Buenos Días', de Aragón Televisión, ha analizado lo que está ocurriendo en su país. Belli ha reconocido que ella misma formó parte de la revolución sandinista que derrocó a Somoza y aupó en los años 80 a Daniel Ortega como presidente de Nicaragua. Sin embargo, la escritora se siente "muy defraudada", y por eso se alejó de un movimiento, que tal y como ha explicado, "está desvirtuado y que permitió a Ortega conseguir hacerse con todo el poder".

Según ha relatado, su única traición ha sido "dedicarse a la escritura y hablar desde el corazón de un país herido". "No he tenido un juicio y he sido acusada de crímenes que no he cometido", ha añadido. "El país se está quedando sin lo más productivo que tiene", ha concluido, tras recordar que cientos de políticos de la oposición, activistas e intelectuales han sido expulsados del país o están en la cárcel. Por eso, pide a la comunidad internacional que intervenga y presione con mayor ahínco a Ortega, no solo a través de las sanciones que afectan a su familia".

Situación de la mujer

Belli reconoce que, en materia de igualdad de género, "se ha avanzado mucho", sobre todo en Occidente. Pero por delante queda "un largo camino que debe incluir a países como Afganistán, en donde todavía se producen lapidaciones". Sobre la violencia machista, la escritora ha manifestado que este es "un problema que tiene un origen en el hombre" y ha lamentado que no se forme en políticas de familia a los alumnos de Secundaria.

Para leer su próxima novela, habrá que esperar un tiempo. La escritora nicaragüense trabaja en ella, pero le está costando mucho avanzar afectada por todo lo que ocurre a su alrededor.