El Tren Blanco viaja de Zaragoza a Canfranc con todos los billetes vendidos

Había 400 plazas y se han agotado. El Tren Blanco ha salido a las 9:00 de este sábado de Zaragoza con destino a la estación de Canfranc, donde han llegado al filo de las 13:00 horas, con algo de retraso. Un trayecto pensado para el disfrute de sus viajeros, con los paisajes invernales y el Pirineo como protagonistas del recorrido. 

Quienes han vivido la experiencia a bordo saben que el viaje más importante se basa en el tiempo. El que se retrocede y el que se invierte en disfrutar. Porque ese es el objetivo. "Nos gusta viajar en tren, vimos la oportunidad de hacerlo y aquí estamos", apuntaba uno de los viajeros que esperaban en el andén antes de montarse en el ferrocarril. "Espero disfrutarlo, porque, además, el maquinista es mi hijo", desvelaba otro. 

La Asociación Zaragozana de Amigos del Ferrocarril y Tranvías, en colaboración con su homóloga madrileña, ha recuperado este emblemático trayecto, de una duración de casi cuatro horas repletas de regalos para los sentidos. La ruta se la conoce como la del Tren Blanco y cubre el recorrido que antiguamente hacían los esquiadores para llegar a Canfranc. Ahora, la esencia del viaje en los vagones históricos, recuperados de entre los años 30 y 80 del siglo XX, es bien distinta.

Canfranc ha sido la primera parada de este histórico tren turístico. La próxima, el 18 de febrero, será Teruel, en el bautizado para la ocasión como Tren de los Amantes.