El servicio municipal ante la okupación recibió el año pasado 54 solicitudes de ayuda

La oficina antiokupacion del Ayuntamiento de Zaragoza recibió el año pasado 54 solicitudes de ayuda, la mayoría de pequeños propietarios o herederos que buscaban soluciones al detectar un intruso en su propiedad. Precisamente, la okupación de varias viviendas en un edificio recién construido en Zaragoza terminó este fin de semana con el desalojo de los okupas y dos detenidos. En febrero la Policía Nacional desalojó un garaje okupado en la calle Montañés de Zaragoza, en el barrio de las Delicias.

"Hay okupaciones económicas, en las que el okupante espera una indemnización; también, okupaciones delictivas, y okupaciones de familias que necesitan un sitio donde alojarse", explica Juan Salanova, coordinador del servicio de afectados por la ocupación ilegal de Zaragoza. 

Aunque es el propietario quien debe pedir que se desaloje su vivienda, los vecinos pueden avisar de la presencia de intrusos en las zonas comunes de la finca, como ocurrió este fin de semana en el inmueble de la calle Tenor Fleta de Zaragoza. Fueron ellos los que avisaron a la Policía Nacional, ya que vieron a varias personas entrar a la finca. Los agentes consiguieron que las dos personas que estaban en una vivienda que no era suya, se fueran de forma voluntaria.

"Si se nota algún tipo de movimiento extraño, se puede avisar a la policía por tranquilidad, para que pasen a revisar lo que pueda estar sucediendo", destaca Ricardo Marzo, administrador de fincas. 

El primer paso, dicen los expertos, es avisar a la policía y, dependiendo de cada caso, el desalojo será inmediato o habrá que recurrir a la justicia. El año pasado los juzgados aragoneses actuaron en 28 casos de ocupación ilegal.