El Banco de Alimentos ha repartido más de tres millones de kilos de comida en lo que va de año

El Banco de Alimentos de Zaragoza es la tabla de salvación para muchas familias con problemas económicos. En lo que llevamos de año, han repartido más de tres millones de kilos de comida y han destinado 700.000 euros en segundos platos, sobre todo, en carne, pescado y huevos. Sin embargo, el Banco de Alimentos también sufre la crisis económica, ya que aumentan las familias a las que tienen que atender. Ahora, las estanterías de legumbres secas, galletas y azúcar están vacías, y también las de alimentación infantil. Una situación que esperan paliar con la Gran Recogida de Alimentos prevista para el mes de noviembre.

En dos semanas el Banco de Alimentos agotará las conservas de pescado; en tres la leche infantil y el arroz; en cuatro la pasta, y a principio de diciembre la leche. Este año han contado con menos donaciones en especie y más económica: 700.000 euros, con los que por primera vez han comprado alimentos frescos como conejo, pollo o pescado congelado. "Se agotarán antes de fin de año y ya no podemos comprar nada. Han aumentado los donativos pequeños de personas físicas, pero claro son 50 euros, 100, 500 alguna vez... Pero claro, no cubre aquellos ingresos tan importantes de los empresarios", explica el presidente del Banco de Alimentos de Aragón, José Ignacio Alfaro. 

Desde el Banco de Alimentos confían en la Gran Recogida del mes de noviembre para recuperarse. De su almacén dependen 22.000 personas, entre las que reparten 15 toneladas diarias de alimentos. Desde septiembre tienen hasta cinco solitudes de ayuda cada semana. "Si no existiera el Banco de Alimentos habría que inventarlo, porque es la herramienta que permite canalizar la solidaridad de las grades empresas, de las grandes productoras y distribuidoras de alimentos, que son los que tienen los alimentos en última instancia y son los que pueden ayudar. Sin el Banco de Alimentos no sería posible toda esa coordinación logística", afirma Miguel Albizu, de Zaragoza Solidaria. 

Además, han reconocido la colaboración de entidades como la Fundación Carreras y la Corporación Guissona por sus donaciones, y han entregado las insignias de oro a dos de sus 150 voluntarios.