¿Cómo pueden detectar en las farmacias las recetas fraudulentas?

La identificación del paciente es la "principal herramienta" con la que cuentan las farmacias para detectar recetas fraudulentas. Los falsificadores tratan con ellas de hacerse principalmente con psicofármacos para "mezclarlos con drogas o venderlos en el mercado negro". Recientemente, la Policía Nacional detuvo en Navarra a una mujer como presunta autora de un delito de falsedad documental tras falsificar 240 recetas médicas con las que llegó a conseguir 10.230 pastillas de un medicamento que contiene fentanilo, una droga muy adictiva. 

"Estamos desgraciadamente muy acostumbrados a lidiar con las rectas falsas", ha señalado este viernes en el programa Buenos Días, de Aragón TV, el farmacéutico Manuel Arribas, quien al mismo tiempo ha indicado que trabajan conjuntamente con la Policía Nacional para detectar estos casos. "El poder identificar al paciente por medio de un DNI o de un pasaporte al cual se le ha prescrito el medicamento es el principal freno cuando surgen sospechas, tras lo cual estos pacientes retiran las recetas y se van". 

Arribas ha manifestado que este tipo de recetas falsas aparecen "de vez en cuando por parte de determinados colectivos". Y ha añadido: "Lo que más tratan de hacerse es con psicofármacos, que pasan a redes para un uso fraudulento, bien para mezclarlo con drogas o para venderlo directamente en el mercado negro, así como los diuréticos o las hormonas tiroideas, en este caso para personas que tienen problemas alimentarios". 

Sobre los riesgos de tomar estos medicamentos sin supervisión médica, el farmacéutico ha indicado que son "terribles". "Últimamente estamos muy habituados a ver en determinado tipo de documentales, que vienen sobre todo de Estados Unidos, los problemas que genera el abuso de este tipo de productos, pero es verdad que aquí, en Europa, el control de la dispensación de estos productos es mucho mayor". 

En este sentido, Arribas ha mostrado su sorpresa por el caso de la mujer acusada en Navarra por un delito de falsedad documental al falsificar recetas médicas, ya que resulta "algo muy complicado de hacer", ha concluido.