Ha comenzado la recolección del Melocotón de Calanda con la previsión de duplicar la cosecha del año pasado

La recolección de la variedad más temprana de la denominación de origen Melocotón de Calanda acaba de comenzar en Caspe. Y los productores esperan duplicar la cosecha de la temporada pasada, muy mermada por las helada y el granizo, y acercarse a los 4,5 millones de kilos. Una buena parte de esos melocotones se consumen fuera de España, y son especialmente apreciados en el centro de Europa.

En cualquier caso, la cantidad final dependerá de la meteorología, y las tormentas, que todavía podrían estropear el fruto que está ya maduro en los árboles, como explicaba el presidente del Consejo Regulador, Samuel Sancho.

Este año, el inicio de la recolección se ha adelantado dos semanas sobre las fechas tradicionales gracias a la variedad temprana que se introdujo el año pasado, la denominada 570, que cuenta con “todas las características de su señas de identidad, calibre, color, dureza y cantidad de azúcar”, explicaba Sancho. Mientras tanto, en las zonas más tardías se terminaban esta semana las labores de embolsado en el árbol, paso que garantiza un madurado uniforme y un producto de mayor calidad.