Adif presenta las actuaciones para impulsar la mejora integral de la línea ferroviaria entre Zaragoza y Canfranc

Adif ha presentado este miércoles las actuaciones que tiene previsto acometer en los próximos meses para impulsar la línea ferroviaria entre Zaragoza y Canfranc (Huesca). El Gobierno español, a través del Ministerio de Transportes (Mitma), ha impulsado las obras de renovación y mejora integral de esta vía, con el fin de terminar los trabajos en el horizonte de 2024, pese a la incertidumbre existente en Francia respecto a la reapertura del túnel internacional que atraviesa el puerto pirenaico de Somport.

A la presentación han asistido los presidentes de Aragón y de la región francesa de Nueva Aquitania, Javier Lambán y Alain Rousset, respectivamente, junto a la presidenta del organismo ferroviario, María Luisa Domínguez, y el subdirector general de Planificación Ferroviaria del Nordeste del Mitma, Alfonso Ruiz.

Parte francesa

En su intervención, Rousset ha reconocido que no existe tomada en París ninguna decisión respecto a la finalización del tramo ferroviario pendiente entre Bedous y la boca francesa del túnel transfronterizo, aunque ha expresado su deseo de conseguir los apoyos necesarios para que el proyecto obtenga una declaración de utilidad pública que permita empezar las obras en 2026 y finalizarlas en 2028.

La falta de un horizonte temporal para la ejecución de las obras de mejora del tramo francés pendiente ha llevado al Mitma, según ha reconocido el subdirector general de Planificación Ferroviaria, a aplazar la colocación de vías de ancho internacional a la espera de que Francia ejecute las obras pendientes en su vertiente.

Parte española

En la parte española, Adif ha movilizado una inversión de 144,2 millones de euros procedentes de los fondos europeos de transformación para impulsar la modernización de la línea entre Huesca y Canfranc mediante la renovación de la plataforma férrea y la instalación de sistemas electrónicos, bloqueos automáticos y tecnología de última generación GSM-R que se gestionará desde el centro de control de Zaragoza. El objetivo, ha explicado la presidenta del Adif, es conseguir la puesta en valor de una infraestructura "esencial" para el transporte ferroviario entre Huesca y Zaragoza, pero también de conexión con Francia y el resto de la Unión Europea.

En concreto, quedan pendientes de finalización o de ejecución los tramos que discurren entre Plasencia del Monte y Ayerbe (20,7 kilómetros), Ayerbe y Caldearenas (37 kms) y Jaca y Canfranc (24,1 kms), el primero prácticamente terminado y los dos restantes adjudicados para su finalización en un plazo de 16 meses.

La responsable del Adif ha destacado que las obras más complejas corresponden a los dos últimos tramos referidos, debido a una complicada orografía montañosa que exigirá la construcción de 11 puentes y viaductos y de 28 túneles. La última fase, que dispone de un plazo de 30 meses de ejecución, contempla la instalación de los sistemas de señalización y de comunicaciones, así como de los correspondientes a garantizar el bloqueo automático y al control por telemando.

La presidenta del organismo ferroviario ha explicado que este trabajo se complementa con las obras del plan director de la conexión ferroviaria entre Zaragoza-Teruel-Sagunto, que cuenta con un presupuesto de 300 millones de euros y un grado de ejecución en la actualidad correspondiente al 65%. Una conexión, ha añadido, que permitirá el tránsito de trenes de mercancías de hasta 750 metros de longitud y que se enmarca en futuro eje de conexión ferroviaria entre el Mediterráneo y el Cantábrico a través de Zaragoza.

Por su parte, el presidente de la región de Nueva Aquitania ha expresado su satisfacción por los avances conseguidos en la parte aragonesa en torno a una línea ferroviaria de importancia a nivel turístico pero también para el transporte de automóviles y de productos agrícolas como el grano, por lo que ha considerado que sería una "incompetencia" que desde el lado francés no se impulsara la adecuación del tramo existente entre Bedous y el túnel. Rousset ha destacado, además, que esta conexión ferroviaria abriría la posibilidad de poner en prueba de forma pionera la aplicación de la tecnología del hidrógeno al sistema de funcionamiento de lo trenes.

El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha explicado que el proyecto de reapertura de la línea tiene como principal objetivo mejorar las comunicaciones transfronterizas entre España y la Unión Europea, pero también convertir a la Comunidad aragonesa en una plataforma logística terrestre "líder" en Europa. Lambán también ha añadido que con proyectos como el de Canfranc "el Pirineo va teniendo muchas palancas y posibilidades de futuro que le permiten apostar por la creación de empleo y de riqueza existentes en la zona, pero siempre velando por preservar el medioambiente".