La trufa negra de mayor calidad se vende en Fitruf a 1.200 euros el kilo

Su sabor y su olor encandilan a los paladares más selectos. Los amantes de la trufa negra tienen una trufa estos días en Sarrión, concretamente en Fitruf, una feria de referencia internacional que ha comenzado este viernes y durará hasta el domingo. Una cita durante la cual la localidad turolense se convierte en el escaparate mundial de la trufa negra. Este hongo comprende cerca de 10.000 hectáreas en toda la provincia. Además, en apenas unos meses se pondrá en marcha el primer regadío social, que comprenderá 618 hectáreas.

Desde las recetas que se hacen en casa hasta los productores. Todas las dudas relativas a este producto se pueden resolver estos días a lo largo de los 40 stands, con expositores procedentes de diversas comunidades autónomas. Durante la cita se ha confirmado que, en apenas unas semanas, abrirá en el municipio un museo dedicado a la trufa negra. Un bien que se vende a 1.200 euros el kilo en la feria, con tapas a tres euros. Ana de Miguel, alcaldesa de Sarrión, confía en "superar los 20.000 visitantes" con los que contó la última edición.

El 2023 también será el año de estreno para la Indicación Geográfica Protegida Trufa de Teruel. "Nos daría un sello de calidad que sería el primero en trufa negra del mundo", comenta Daniel Brito, de la Asociación de Truficultores de Teruel.  "La producción de este año está agotada. Hasta el año que viene no tendremos plantas", comentan los expositores. Aseguran que Fitruf es un reclamo para turistas que vienen "de muy lejos para degustar estas trufas".

Uno puede salir como un experto, catador o incluso aprenderlo todo desde fertilizantes al vivero. Porque, como demuestran en Fitruf durante estos tres días, en Aragón gozamos de un hongo que tiene una gran explotación a nivel gastronómico y un prestigio de talla mundial.