El sector de la nieve genera más de 200 millones de euros al año

El sector de la nieve en Aragón genera más de 200 millones de euros al año, y aporta el 7% al Producto Interior Bruto de la Comunidad y un 10% en el caso de la provincia de Huesca, según los datos del Ejecutivo autonómico. La repercusión económica no solo se queda en las instalaciones, sino que revierte en hoteles, restaurantes y comercios de la zona. En total, Aragón ofrece casi 350 pistas de esquí alpino y casi 400 kilómetros esquiables.  

Solo en el valle de Tena la nieve crea 1.300 puestos de trabajo directos y hasta 13.000 indirectos. Durante la temporada, aumentan las plantillas en los restaurantes, en los comercios y en los hoteles. De diciembre a marzo facturan la mayoría de sus ingresos anuales. "El 80% de la facturación de los hoteles se hace en invierno", asegura la gerente de la Asociación Turística Valle de Tena, Elisabeth Calderón. 

Misma tónica en el resto de valles con dominios esquiables, como en Gúdar-Javalambre, donde Valdelinares ha sido la primera estación aragonesa que ha abierto esta temporada. "Este año ha arrancado muy bien el puente, creo que es de los mejores que hemos hecho y en diciembre se consolidará ", indica Juan Carlos Escuder, presidente de la Asociación Empresarial Gúdar - Javalambre.

"En la zona que está cerquita de las pistas, los fines de semana y lo que son puentes, estamos rozando el 100%", asegura Jesús Marco, presidente de la Federación Aragonesa de Turismo Rural. El año pasado esquiaron más de un millón de personas en las pistas aragonesas.

Casi 350 pistas y 400 kilómetros esquiables 

Aragón ofrece cerca de 350 pistas de esquí alpino para todos los niveles y todas las edades. Los seis centros invernales suman 395 kilómetros esquiables repartidos en las provincias de Huesca y de Teruel.  A ello hay que sumar una extensa oferta de servicios y actividades 'après-ski'.

Cerler tiene la mayor cota: 2.630 metros en su mítico Gallinero; Formigal-Panticosa posee el mayor dominio: 182 kilómetros; y los centros turolenses son perfectos para los debutantes. "Más de 100.000 personas esquiaron en Teruel la temporada pasada. Somos motor de desarrollo de las comarcas donde estamos, tanto en el Pirineo como en Teruel, y en invierno es fundamental que nosotros estemos operativos", explica Mario Gómez, director de Aramón Nieve de Teruel. 

Además, Astún alberga una variedad de pendientes con descensos destacados para los más experimentados y Candanchú es la más histórica, ya que fue la primera inaugurada en España en 1928. "Lo que podemos destacar de Candanchú es su zona de debutantes, que es accesible para todo tipo de familias y luego tenemos que destacar nuestras montañas que son las más alpinas del Pirineo que ofrece a la gente unas vistas inmejorables", indica Stephan Pantoja, director comercial de la estación.