Estruendo, emoción y tradición contra el silencio en Calanda

Al mediodía, fieles a la tradición, con el sonido de la primera campanada del reloj de la iglesia, el estruendo de miles de tambores y bombos ha roto el silencio en Calanda. El acto de Romper la Hora en el mediodía del Viernes Santo, en la Plaza de España, está declarado Fiesta de Interés Turístico Internacional.

Como es habitual, cada año es una figura representativa del mundo del cine quien se encarga de realizar el primer golpeo con una maza en el bombo gigante y de este modo quebrar el silencio de la localidad natal del director de cine Luis Buñuel. En esta ocasión, ese honor ha recaído en el director de cine Nacho García Velilla, que ha estado acompañado por Joaquín Barberán, cofrade de El Encuentro.

"Es un silencio absoluto y cuando da la señal Alberto es ya increíble. A nivel sonoro, por muchas películas que hagas, nunca vamos a tener algo tan sumamente impresionante como esto", ha destacado Velilla tras el momento álgido.

"Sobre todo es estar ahí, es compartirlo con la gente, con los calandinos con todos que nos visitan. Es algo que se lleva muy dentro y estoy muy contento", ha subrayado el alcalde de Calanda, Alberto Herrero, que ha estado acompañando del consejero de Turismo, Manuel Blasco: "Se mezcla el fervor religioso con la costumbre de más de cien años".

La Plaza de España, teñida del color morado de las túnicas y terceroles de los asistentes, ha comenzado en ese momento a atronar tras la orden del alcalde, que ha marcado el inicio con la vara de mando en alto.

Plaza de España de Calanda este viernes. 

El Ayuntamiento prevé que este año participen unas 12.000 personas en el acto, lo que supondrá triplicar la población de este municipio, que habitualmente suma unos 4.000 vecinos.

26 horas de estruendo en Calanda

Se da la circunstancia de que Calanda es el único municipio de los miembros de Ruta del Tambor y Bombo que no rompe la hora el jueves, como hizo, por ejemplo, Híjar. Eso hace peculiar esta tradición, en la que miles de personas comienzan a tocar, sin descanso, hasta las 14:00 horas del sábado.

En total, la localidad estará 26 horas sumida en el toque de tambor y bombo que incluyen momentos especialmente emotivos, como la denominada Hora Buñuel, a las 2:00 de la madrugada del viernes al sábado, en la que los vecinos se reúnen a tocar frente a la estatua del cineasta en la Plaza de España.

La tradición de Romper la Hora se remonta al año 1127, cuando un pastor que estaba con su rebaño en las montañas próximas al pueblo vio acercarse al invasor musulmán y usó un pandero para avisar del peligro al pueblo, lo que permitió a los calandinos protegerse mientras celebraban los actos de la Semana Santa.

Y aunque posteriormente se tocaba el tambor para conmemorar este suceso, la web de la Semana Santa de Calanda recoge que el origen de los tambores hay que situarlo a finales del siglo XVIII, según describe Luis Buñuel en sus memorias 'Mi último suspiro'.