Diseñan una aplicación para la detección temprana de los trastornos de conducta alimentaria en adolescentes

Aragón va a poner en marcha un proyecto piloto para detectar de manera precoz los trastornos de conducta alimentaria (TCA) en adolescentes, entre 12 y 18 años, mediante una aplicación de realidad virtual que se testará en dos centros este curso 2023-2024 y cuyo objetivo es implantarlo, una vez validado, el curso siguiente.

La aplicación está impulsada por la Fundación APE y será el Instituto de Investigación Sanitaria de Aragón el encargado de realizar los test de validación, en un proyecto que cuenta con el respaldo de los departamentos de Educación y Sanidad.

Los consejeros de Educación, Ciencia y Universidades, Claudia Pérez Forniés, y Sanidad, José Luis Bancalero, se han reunido este miércoles con los fundadores y patronos de la Fundación APE, Carlos Peralta y Chelete Echechiquía, para abordar la implantación en Aragón de una herramienta de realidad virtual que permita la detección precoz en adolescentes de los trastornos de conducta alimentaria.

De esta manera, Aragón va a ser pionera en el desarrollo de este espacio virtual para la detección precoz de los TCA en adolescentes y que Bancalero se ha mostrado confiado en que se pueda exportar tanto a otras comunidades autónomas como a países vecinos y también latinoamericanos.

Datos "preocupantes"

Bancalero ha calificado de "preocupantes" los datos que constan en el sistema público de salud aragonés. Entre 2019 y 2021 se han duplicado el número de casos de TCA y en el año 2022 y lo que va de 2023 el aumento ha sido del 32%.

La parte tecnológica la ha desarrollado la empresa aragonesa puntera en realidad virtual Imascono, y en la parte de contenido han contado con la participación de expertos médicos, liderados por el psiquiatra, psicólogo y nutricionista Ignacio Jáuregui.

La aplicación despliega un espacio virtual interactivo, cuyo principal objetivo es que los escolares, mediante diferentes dinámicas de juego y bajo un entorno de espontaneidad, puedan realizar los cinco pasos del test SCOFF, instrumento científico para el cribado de los casos de TCA en adolescentes escolarizados, y que actualmente se pasa por escrito con escaso retorno de casos. Este cuestionario responde al acrónimo de las iniciales de las preguntas en cada ítem en inglés: Inducirse vómito (sick), control sobre la ingesta (control), pérdida de peso (out weight), sentirse gordo (fat) y la comida domina la vida (food).

El propio programa autocorregirá el test y generará automáticamente un sistema de alerta que permita poner en marcha mecanismos de ayuda a los menores o adolescentes que lo requieran.

La validación científica de la herramienta se hará ya este curso a través de un proyecto piloto en dos centros educativos de la comunidad autónoma y estará liderada por el doctor Pedro Ruiz Lázaro, jefe de servicio de Psiquiatría del Clínico.

Para garantizar su correcto funcionamiento desde el punto de vista clínico, se conformarán grupos de trabajo en los que se realizarán los test virtuales y también por el método tradicional, así como posteriores entrevistas, mediante las que se evaluará la fiabilidad de la herramienta.

En Aragón, y especialmente tras la pandemia de la COVID-19, ha habido un aumento exponencial de la incidencia de estos problemas, con casos más graves que, con frecuencia, han necesitado ingreso hospitalario.

También se ha observado inicio de este tipo de trastornos a edades más tempranas (10 años). Este 2023 ya se han valorado 110 nuevos casos, de acuerdo a los datos de la Unidad de Trastornos de Conducta Alimentaria del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa.