Aragón pierde 200 agricultores cada año y su edad media supera los 61 años

Las afiliaciones de agricultores no paran de bajar desde 2018. El motivo principal son las jubilaciones sin relevo generacional. En el abandono de esta actividad también influye la caída de la renta que han sufrido durante los últimos años. Cada año Aragón pierde 200 agricultores, según los datos recabados por el sindicato UAGA.

Un descenso que no tiene buenas perspectivas, ya que la edad media del agricultor aragonés también sube: en una sola temporada ha aumentado año y medio y está por encima de los 61 años. UAGA también destaca que prácticamente todos los jóvenes agricultores que se dan de alta vienen de una familia vinculada al campo, pero, aun así, no son suficientes para que el relevo generacional cubra las bajas.

Jorge y Roberto Cajo son dos agricultores que se han incorporado a este sector al hacerse cargo de la explotación familiar. Después de meses de pruebas y errores, de obras y muchos gastos (han invertido 300.000 euros), ven como empiezan a erguirse en la localidad zaragozana de La Almunia sus 20 nuevas hectáreas de albaricoque. “No son suficientes las subvenciones como para ayudar a cualquier persona a intentar instalarse como joven agricultor", lamenta Roberto Cajo, también responsable comarcal de UAGA en La Almunia.  

Jorge y Roberto Cajo, dos jóvenes agricultores que se han incorporado al sector.

En tres años esperan recoger un millón y medio de albaricoques, un 50% más que ahora, gracias a los nuevos árboles que suman a la explotación familiar. "Tienes que plantarlo en un sitio que se escape del hielo. En cultivos que tenemos aquí al lado, de albaricoque precisamente, con heladas que el año pasado se quedaron sin un solo fruto en el resto de España, aquí hemos recogido medias cosechas", relata Jorge Cajo, responsable de fruta en UAGA.

Los dos coinciden en subrayar que, incluso con ayudas a la incorporación, es prácticamente imposible empezar en el campo sin un respaldo familiar. Con 23 y 31 años, respectivamente, son una excepción en un sector envejecido. 

Esther Rubio también forma parte de los jóvenes que se dedican al campo, en su caso a la ganadería en Teruel. “Si en un futuro no tenemos los agricultores y ganaderos suficientes para soportar el sistema y alimentar a la población, ¿en manos de quién caerá esa responsabilidad?”, se pregunta la también responsable de jóvenes en UAGA.

En 2023, 159 jóvenes se han incorporado a este sector en Aragón, insuficientes para lograr un relevo generacional efectivo. Estos nuevos agricultores y ganaderos piden allanar el camino para que no tengan que afrontar altas inversiones y largos trámites con escasa financiación.

La tecnología, una herramienta para ganar rentabilidad

Por otro lado, este viernes se ha celebrado en Huesca una jornada sobre agricultura de precisión. Durante todo el día los agricultores podrán conocer las últimas tecnologías que les permiten optimizar recursos, ser más competitivos y sostenibles. 

El dron se ha convertido en una de las herramientas más destacadas entre estos avances, ya que permite aplicar tratamientos al campo sin ser invasivos. “Podemos entrar en cualquier estadio de cultivo y con cualquier condición de suelo, en momentos en que una máquina tradicional haría un daño al cultivo. Con los drones ahorramos este daño. Además a través del mapeo nos especializamos en poder hacer una aplicación para poder aplicar solo lo que necesita la planta”, ha explicado el responsable de agricultura 4.0 de Maquinaria agrícola Plumed, Borja Lasheras.