Uno de cada diez bebés nacidos en España es concebido por reproducción asistida

Uno de cada diez bebés nacidos en España es concebido gracias a las técnicas de reproducción asistida. Según los últimos datos publicados por la Sociedad Española de Fertilidad (SEF) y el Ministerio de Sanidad, relativos a 2021, 40.638 niños llegaron al mundo ese año a través de estos tratamientos, un dato que supone un crecimiento del 33% respecto al periodo anterior.

Durante ese ejercicio, el registro nacional de la SEF contabilizó un total de 165.453 ciclos de Fecundaciones In Vitro (FIV) y 33.818 inseminaciones artificiales, los métodos más habituales. De hecho, los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) muestran que, en Aragón, de las mujeres que se han sometido alguna vez a un tratamiento de reproducción asistida, el 38% lo ha hecho a inseminación artificial y el 55,4% a fecundaciones in vitro o a un procedimiento de inyección intracitoplasmática (ICSI).

"La técnica más frecuente es la fecundación in vitro, que permite controlar más parámetros y que, al introducir el embrión directamente en el útero, alcanza un porcentaje de éxito del 50%. Si, además, se realiza con óvulos de una donante de entre 18 y 25 años, la tasa se incrementa", explica Antonio Urriés, jefe de la Unidad de Reproducción Asistida en Quirónsalud Zaragoza. "En el caso de la inseminación artificial -añade-, el índice de materialización del embarazo ronda el 16%".

Otra de las cuestiones que se desprende de los datos recogidos por la Sociedad Española de Fertilidad es que, debido a los avances tecnológicos, las gestaciones múltiples continúan en descenso, situándose por debajo del 10% gracias a un mayor número de transferencias de un solo embrión aplicado en todas las técnicas. 

Actualmente, en la Comunidad existen tres centros públicos -los hospitales San Jorge, en Huesca, y Lozano Blesa y Miguel Servet, en Zaragoza- y también varios privados -Centro Médico Ginfer, Clínica Ginecológica de Zaragoza, Clínica Gobest, Clínica Montpellier y Quirónsalud- en los que se realizan estas técnicas para ayudar a quienes desean quedarse embarazadas.

Una cuestión de edad

"Hemos visto una evolución, sobre todo, en la edad de las parejas que acuden a las consultas. Mientras en el año 2000 la media era de 35 años, ahora supera los 39, con los problemas que ello supone", comenta Urriés sobre las causas del incremento de este tipo de tratamientos en España. El experto subraya que, con el paso del tiempo, "las tasas de fertilidad se ven muy comprometidas". "A mayor edad, menores probabilidades de embarazo. Cada vez vienen más parejas que superan los 40 años, y eso repercute en los resultados", asegura.

El doctor resalta que "la edad de la mujer es el factor más importante de cara a un embarazo". "Somos animales y, como cualquiera de ellos, estamos preparados para tener hijos en el primer tercio de nuestra vida, aunque, actualmente, con menos de 30 años, prácticamente ninguna mujer se plantea ser madre". Los datos del INE avalan esta afirmación: la media de edad de las madres aragonesas fue, en 2022, de 32,83 años.

"En el caso de las mujeres universitarias con una vida laboral activa, esta cifra se incrementa a los 35 años, cuando la tasa de fertilidad ya ha caído a la mitad", agrega Urriés. El doctor también apunta que, con el aumento en la edad de las madres, crece también la probabilidad de alteraciones genéticas en los óvulos, que pueden dar lugar a abortos o a determinadas patologías en el bebé.

Por otro lado, el retraso en la maternidad también podría estar detrás del incremento de los partos inducidos, que han aumentado un 10% en España desde el año 2010, según las últimas estadísticas del Ministerio de Sanidad.

"La evolución muestra que una de cada seis mujeres va a tener que recurrir a estas técnicas. Por eso, una de las cuestiones en la que insistimos a las parejas es que se planteen su futuro reproductivo lo antes posible. Que sean conscientes de que si la van a retrasar puede que luego encuentren problemas", asegura el especialista.

Para solventar este posible obstáculo, el experto recomienda la preservación de óvulos. "La fertilidad del hombre también va disminuyendo, aunque no al mismo ritmo. Con los años, baja el número de espermatozoides, pero no su calidad, algo que sí ocurre con los óvulos", aclara, y señala que, dentro de los problemas de fertilidad, el 30% se corresponden con causas femeninas, el 30% a masculinas, el 20% a razones mixtas y otro 20% son desconocidas.