Una nueva normativa afectará a nueve de cada 10 ascensores en Aragón y supondrá derramas en algunas comunidades

Una nueva normativa del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo prevé actualizar las medidas de inspección y mantenimiento, además de dotar de mayor seguridad a los ascensores ya instalados. En Aragón hay registradas 34.960 instalaciones, de las que el 90%, según estimaciones de empresas técnicas, se verán afectados en mayor o menor medida -desde modificaciones en la maquinaria a cambios en la frecuencia de las inspecciones-. Una previsión que consideran muy elevada desde el área de Industria del Gobierno autonómico, que a su vez recalca la rigurosa inspección y mantenimiento de los aparatos existentes.

El cambio más destacable se centra en el aumento de las medidas de seguridad, con el objeto de reducir el riesgo de accidentes de usuarios y trabajadores del sector. "En 2022 se redujeron los accidentes de usuarios en un 80% y de trabajadores en un 8% frente al 2021. El año pasado, en España se registraron en total 463 siniestros, de los que el 97% fueron leves", apunta Javier Rodríguez Royo, responsable Regional de Aragón y La Rioja de Ascensores Duplex. 

El impacto al medio ambiente es otro de los puntos destacables de la norma que pretende mejorar la eficiencia de los equipos, con el respectivo ahorro económico que podría suponer.

Entre otras medidas, la nueva normativa podría suponer cambios en la cabina del ascensor, en la protección contra el cierre de las puertas o en la adaptación del contrapeso.

Borrador de medidas y soluciones de la nueva ITC. / Duplex Ascensores

El 75% de los ascensores de la Comunidad están en la provincia de Zaragoza (26.081), el 18% en Huesca (6.273) y el 7% restante en Teruel (2.606), según datos de la empresa Ascensores Duplex. En el año 2022 se instalaron 581 elementos. El crecimiento en la última década ha sido del 23%. "Hace 10 años había 31.082 ascensores registrados y en el año 2000 eran 17.783. La colocación de este tipo de maquinarias crece cada año, provocado por la obra nueva y la rehabilitación de viviendas poco accesibles", tal y como señala Rodríguez. 

¿Nueva derrama en la comunidad?

Los ascensores instalados desde 2017, alrededor de 2.600 en Aragón, "casi con total seguridad, no tendrán que realizar ninguna modificación", apunta el experto. La normativa afectará a múltiples aspectos y no solo a la posible mejora o cambio de instalación, también al periodo en el que debe efectuarse la inspección reglamentaria realizada por un Organismo de Control Autorizado. 

El 50% del parque de ascensores de Aragón tiene más de 25 años. Una edad por encima de la media de española, debido principalmente a la antigüedad del parque inmobiliario aragonés.

La puesta en vigor de la norma puede provocar derramas en las comunidades de vecinos. Leticia Alcaine es la vicepresidenta de una comunidad situada en el barrio zaragozano del Actur, donde sustituirán, de manera integral, todos sus ascensores: un total de 15, que dan servicio a siete edificios. "Construyeron los pisos hace 40 años y sí echo en falta que las puertas sean automáticas y que hubiera más espacio", dice.

Los trabajos de mejora suponen un nuevo cargo a las arcas comunes, que se alargará durante siete años. En este caso concreto, por vivienda la derrama asciende a casi 2.700 euros, lo que supone 32,10 euros al mes. Una cuantía "obligada que retrasa otros gastos", añade Alcaine, pero que espera que repercuta en el ahorro de los gastos de luz y mantenimiento de las instalaciones, para que este desembolso "merezca la pena". 

El coste de un ascensor, sin la necesidad de realizar una obra auxiliar, puede rondar entre los 15.000 y los 30.000 euros, detallan desde Ascensores Duplex, hasta más de 200.000 euros, si se trata de un proyecto complejo que necesita la reconstrucción de accesos, rellanos y escaleras.

Al cierre de 2022 había registrados 1.169.316 ascensores en España. En el último año, se instalaron 15.285 ascensores, según datos de la Federación Empresarial Española de Ascensores (FEEDA). Además, este es el país de la Unión Europea con más ascensores por habitante: uno por casi cada 50 personas.