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SALUD MENTAL

Ocho de cada diez jóvenes utilizan herramientas digitales para cuidar su salud mental

El 79,9% de los jóvenes y adolescentes afirma que se apoya en aplicaciones y portales dedicados a la psicología y el bienestar emocional

ALEJANDRO LÓPEZ /
El 77% de los jóvenes afirma que las aplicaciones les ayudan a cumplir hábitos mentales y rutinas.
icono foto El 77% de los jóvenes afirma que las aplicaciones les ayudan a cumplir hábitos mentales y rutinas.

La importancia de cuidar nuestra salud mental ha calado en la sociedad desde su base. Entre las nuevas generaciones no existe el tabú sobre este asunto. Crecen sabiendo que es necesario preocuparse de cuidar una parte de la salud invisible, pero sensible. Hablamos de nómadas digitales, por lo que no es de extrañar que haya sido en la tecnología donde ocho de cada diez jóvenes y adolescentes encuentran herramientas de apoyo psicológico

Es una de las principales conclusiones del estudio 'La innovación tecnológica aplicada al cuidado de la salud. La mirada de adolescentes y jóvenes', elaborado por la Fundación Pfizer y la Fundación Fad Juventud. Una encuesta realizada a 1.504 jóvenes de entre 15 y 29 años con el objetivo de explorar el uso que los jóvenes hacen de las tecnologías para su salud y bienestar. Más del 65% sigue cuentas relacionadas con la salud y el bienestar y alrededor del 52%, cuentas o perfiles de profesionales o especialistas sanitarios.

Un complemento a la terapia

José Francisco Mendi forma parte del Colegio Profesional de Psicólogos de Aragón. "Si queremos que los jóvenes se acerquen a los buenos hábitos hay que hacerlo a través de sus herramientas. Es lógico que recurran a las apps". Para este psicólogo clínico zaragozano, la tecnología no está reñida con la terapia presencial, sino que puede ser "un buen complemento". 

Por otro lado, Mendi considera que este tipo de aplicaciones o canales de ayuda emocional pueden tener una vertiente negativa si no se hace un uso adecuado. "Lo que veo en algunas de estas herramientas es que son demasiado genéricas. Deberían adaptarse más a cada persona", afea. "Las herramientas te pueden dar unas pautas, pero cuando veamos que vamos camino de una necesidad (no de un mantenimiento) esas herramientas se quedan cortas". 

Además, en una tendencia que podría extenderse a otros campos de la salud o de la ciencia en general, los usuarios de estos servicios corren el riesgo de seguir consejos de alguien que no es un profesional. "A veces vemos barbaridades en las apps en forma de nefastos consejos realizados por personas que tienen muchos seguidores, pero que no son profesionales", y concluye: "Estaríamos cometiendo un grave error si nos fiamos más de la palabra de un 'influencer' que de la de un profesional".

Ansiedad, depresión y habilidades sociales

Como este psicólogo denomina, "es una triada habitual en el diagnóstico psicológico de los adolescentes la formada por ansiedad, depresión y habilidades sociales". Una mezcla frecuente durante la etapa en la que aún se está conformando la personalidad. "La inseguridad de la situación económica, las rupturas de relaciones de amistad, de parejas, todo eso genera problemas de ansiedad, de relación y comunicación, y problemas que pueden derivar en una depresión", y añade que, en ocasiones, "hablaríamos también de comportamientos adictivos".

Como alternativa a las herramientas que los jóvenes pueden encontrar en tiendas digitales, Mendi recuerda que existen recursos municipales y autonómicos gratuitos. "Tenemos asesorías psicológicas. Algunas a través de la Universidad de Zaragoza, del Área de Juventud o del Salud. No son terapias como tal, pero hay recursos a los que un joven podría recurrir sin tener que pagar", aconseja. 

Un arma de doble filo

El pasado mes de octubre, el Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad (Ontsi) publicó un informe sobre la relación entre los jóvenes y adolescentes y el impacto que tiene sobre su salud mental el uso continuado de redes sociales y portales digitales. Según ese estudio, un 58% de adolescentes siente una mayor aceptación, un 71% expresa mejor su creatividad y el 80% se siente más conectado a su entorno. Concluye por lo tanto que la tecnología y las redes sociales se han convertido en herramientas poderosas para la expresión personal y la construcción de relaciones. 

Entre la población más joven destaca la creciente tendencia a considerar el suicidio. Por primera vez, un 48,9% ha pensado en ello en algún momento de su vida. Entre la comunidad terapéutica destacan la urgente necesidad de abordar la salud mental en este sector de la sociedad.