Publicidad
EN ARAGÓN

Las cifras de la violencia de género: 2.195 casos, 195 encarcelados y el 5% con dispositivos de seguimiento

Más del 60% de las mujeres que denuncian necesitan protección policial, en especial en Teruel, el 73,7% . En Zaragoza hay tres juzgados especializados en violencia sobre la mujer

T. P. A /
La orden de alejamiento es la herramienta más común en casos de violencia de género. / Canva
icono foto La orden de alejamiento es la herramienta más común en casos de violencia de género. / Canva

El 60,4% de las 2.195 mujeres que han denunciado violencia de género en Aragón cuenta con protección policial -casi la mitad de ellas nacidas fuera de España-,  según los últimos datos (diciembre 2023) publicados por el Instituto Aragonés de Estadística (Iaest).Una cifra que da cuenta del grado de violencia al que están expuestas las víctimas. "Los agentes hacen una labor muy buena", asegura la jueza Belén Bellestín, del Juzgado de Violencia sobre la Mujer nº2 de Zaragoza, que hace hincapié en la necesidad de contar con más recursos. 

Algo que comparte Natalia Morlas, presidenta de la Asociación Somos+, pero pone en entredicho la bondad de los datos: "Es irreal que el 60% de las mujeres tengan esa protección. Es temporal y depende del riesgo. Algo que los maltratadores saben y se cuidan de no hacer nada para que baje ese riesgo y se retire la protección a la víctima. Necesitamos más agentes". 

Por provincias, Zaragoza es la que más casos registra (1.544), seguida de Huesca (461) y Teruel (190). Respecto al número de mujeres que necesitan protección policial, solo Teruel sobrepasa la media nacional, que se sitúa en el 61,31%, mientras que el 73,7% de las turolenses que denuncian cuentan con ello. 

La magistrada Ballestín lleva ocho años desempeñando su labor en el citado juzgado. Un tiempo en el que ha visto situaciones muy diversas, pero también ha vivido de primera mano el auge de las denuncias. "En estos años, he visto como ha aumentado el número de mujeres que deciden dar el paso de denunciar. Por eso, se ha creado un tercer juzgado en la ciudad", apunta. 

Por su despacho pasan mujeres con historias de todo tipo, pero todas con una base común: el maltrato, el miedo y la dependencia. "Intento hablar con ellas. Estoy una hora o más con cada una, las escucho, empatizo con lo que me cuentan y trato de ayudarlas", comenta Ballestín, que asegura que el Juzgado de Violencia sobre la Mujer es distinto a otros: "No me limito a dictar sentencia y estar en mi despacho. Aquí el trato con la víctima es directo. Me han llegado a preguntar si de verdad soy la juez. No estamos acostumbrados a un trato personal". 

A pesar de que su trabajo se centra en el ámbito jurídico y en aplicar la ley, se esmera en aportar su ayuda a las mujeres, en animarlas a denunciar y poner a su alcance todas las medidas de protección que existen. Una de ellas es la orden de alejamiento. "Lo primero que piden, casi siempre, es que su maltratador no pueda acercarse a ellas, que no pueda comunicarse. Allí es cuando dictamos las órdenes de alejamiento. La más común es la de 200 metros", explica la juez. 

Se trata de una medida temporal. Su activación depende de la duración del procedimiento jurídico. Una herramienta que, a pesar de tener un uso muy extendido, tiene ciertas limitaciones, como indica Morlas: "Es solo un papel. Es gordo que las víctimas tengan que sentirse amparadas y protegidas por un papel y por la buena fe de que el maltratador no va a hacer nada y va a cumplir". 

El 8,8% de los denunciados acaban en prisión

En Aragón cumplen condena en centros penitenciarios 195 hombres acusados de violencia de género, lo que supone un 8,8% respecto al total de denuncias, como indica el Iaest. Una cifra similar a la nacional, el 8,7%. Por provincias, Huesca y Teruel están por debajo de ambas medias, 7,38% y 6,84% respectivamente, mientras que Zaragoza las supera, un 9,59% de ingresos sobre las denuncias. 

Una realidad que denuncian desde Somos+. "El sistema hace que existan víctimas de primera y de segunda. Nosotras somos de segunda", lamenta la presidenta de Somos+, que aboga por aumentar las penas y por la aplicación de la prisión permanente revisable en casos graves de violencia de género. "¿Por qué un progenitor que mata a su hijo va a la cárcel de por vida y un hombre que mata a su pareja, por ejemplo, cumple cinco años y sale?", se pregunta. 

Las sentencias que incluyen condenas de prisión tienen una particularidad, como explica la juez Ballestín: "No podemos decretarlo si no nos lo piden, aunque crea que es necesario. Debe ser el abogado de la víctima o el Ministerio Fiscal el que lo solicite". "Debe haber también un quebrantamiento de la orden de alejamiento, amenazas o agresiones fuertes", comenta la magistrada, que lamenta no poder aplicar esas penas sin una petición. 

Existe una solución intermedia entre la orden de alejamiento y la cárcel. Se trata de los dispositivos de alarma y de seguimiento. En la Comunidad hay 356 hombres que portan estos aparatos, el 16% de los denunciados. Eso convierte a estos elementos en una de las principales herramientas utilizadas tras un caso de violencia de género. 

Para la juez Belén Bellestín se trata de un dispositivo limitante también para ellas: "Condiciona la vida de la mujer porque tiene que llevar encima un aparato que pita si el agresor se acerca, dando aviso a la policía, pero también alerta si el del hombre se queda sin cobertura o sin batería. Eso hace que ellas dependan siempre de un aparato y de cómo él lo utilice". 

Se trata de un elemento que tampoco agrada a Morlas, que advierte de su reducida efectividad: "Se lo ponen y quitan cuando quieren. Hemos visto casos de hombres que se lo quitaban para irse de fiesta. Saben manipularlo".

A la luz de las cifras publicadas por el Iaest, la parte positiva extraíble es el aumento de las denuncias. "Se nota que el entorno de la víctima, sus familiares y amigos, son más proactivos y tienen las herramientas necesarias para señalar un caso de maltrato", asegura la juez, que recuerda que cualquiera que sepa de una situación de riesgo para una mujer puede denunciarlo para que la Policía Nacional pueda investigarlo y ayudar a la víctima. 

El 016 atiende a todas las víctimas de violencia machista las 24 horas del día y en 53 idiomas diferentes, al igual que el correo 016-online@igualdad.gob.es; también se presta atención mediante WhatsApp a través del número 600000016, y los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900 20 20 10.

En una situación de emergencia, se puede llamar al 112 o a los teléfonos de la Policía Nacional (091) y de la Guardia Civil (062) y en caso de no poder llamar se puede recurrir a la aplicación ALERTCOPS, desde la que se envía una señal de alerta a la Policía con geolocalización.