Estafas laborales a través de WhatsApp: "Hola soy Vivi, de RR. HH. de Linkedin, ¿hablamos?"

"Soy Vivi, encantado de conocerte. Soy de Recursos Humanos (Linkedin). ¡Tengo buenas noticias para ti! ¿Puedo tener unos minutos de su tiempo?". Lo que acaban de leer se asemeja a una oferta de trabajo, que ha llegado a su conocimiento a través de un WhatsApp del teléfono. Detrás de ella solo se esconde una estafa. La Policía Nacional alerta de que cualquier notificación, que recibamos en nuestras terminales y resulte mínimamente sospechosa, debe ser eliminada y denunciada.

"Nadie está a salvo de los 'hacker' que buscan hacerse con nuestros datos a cualquier precio". Quien hace esta alerta es Beatriz Gambón, inspectora de la Policía Nacional en Zaragoza. "Hace unos días un compañero de profesión se quedó temporalmente sin redes sociales tras un robo de datos que sufrió", recuerda esta profesional. Por eso, la mejor seguridad es la prudencia y preguntar antes de realizar cualquier acción que pueda llevar luego al disgusto.

Las estafas suelen provenir de números desconocidos del extranjero.

Desde la Policía Nacional recuerda que "las estafas son cíclicas, aunque las de internet muestran una clara tendencia al alza". "En los 80, se producían atracos en las entidades bancarias y ahora se disparan las estafas a través de internet", reflexiona Gambón. En cualquier caso, los delincuentes siempre tienen en el dinero el foco de todas sus actuaciones.

Cómo evitar caer en el engaño

El Instituto Nacional de Ciberseguridad, dependiente del Ministerio de Transformación Digital y de la Función Pública, da una serie de consejos para evitar ser estafados.

Cuando encontremos una oferta de empleo por Internet, hay que asegurarse de que la información que contiene es coherente. Y hay que preguntar: "¿Existe o es conocida la empresa que oferta la vacante?, ¿el salario ofertado se ajusta a la descripción del puesto de trabajo? ¿Dónde se realizarán las labores?, ¿habrá proceso de selección previo?, ¿se trata de una actividad legítima?, etc".

Si la oferta de empleo se recibe por Internet sin haberla solicitado o haberse apuntado a ningún proceso de notificación de estas características, hay que dudar sobre su veracidad y buscar más información sobre dicha oferta antes de proceder a realizar ninguna acción.

Los anuncios de trabajo que están mal redactados o contienen faltas de ortografía hay que ponerlos en cuarentena, son indicios claros de estar ante un posible fraude. Las empresas con cierta reputación, cuidan mucho su imagen y no suelen cometer este tipo de fallos.

En cualquier caso, si tras enviar una solicitud para optar a un puesto de trabajo, piden dinero o efectuar un pago bajo algún pretexto, no hay que acceder a ellos. Primero, hay que analizar la situación detenidamente, ya que se podría estar ante un caso claro de fraude.

Por último, el Gobierno recomienda sospechar de anuncios que publiciten trabajos desde casa o en el extranjero, muy bien remunerados, en los que no se pide ningún tipo de experiencia previa. Esta es una de las principales estrategias utilizadas por los ciberdelincuentes: publicar trabajos en los que supuestamente se puede ganar dinero, en poco tiempo y de manera fácil.