España envía dos buques de guerra al Mar Negro ante la tensión entre Rusia y Ucrania

España enviará en los próximos días la fragata Blas de Lezo al Mar Negro para integrarse junto al buque de acción marítima Meteoro, que partió el pasado martes, en el despliegue disuasorio de fuerzas de la OTAN ante la escalada de la tensión que se vive en la frontera entre Ucrania y Rusia. 

Así lo ha avanzado este jueves la ministra de Defensa, Margarita Robles, que ha circunscrito la maniobra a la habitual participación de España en todos los despliegues organizados por la Organización del Tratado Atlántico Norte, como el actual contingente de 300 soldados desplegado en Letonia.

La fragata Bas de Lezo partirá "en tres o cuatro días", según ha concretado Robles, y se unirá al cazaminas Meteoro, que zarpó este pasado martes de su base en el Arsenal Militar de Las Palmas de Gran Canaria  para relevar al buque Rayo y situarse al frente de la Agrupación Naval de Medidas contra minas número 2 de la OTAN, cuyo radio de acción incluye el Mar Negro y el Mediterráneo.  

La ministra de Defensa también ha reconocido que España valora el envío de cazas a Bulgaria, pero, en cualquier caso, ha abogado exclusivamente por la "vía diplomática" para resolver la situación creada por la posible intención de Ucrania de sumarse a la OTAN y la amenaza de invasión que percibe ante las maniobras de su vecino ruso.

En ese sentido, Robles ha advertido que la OTAN "es muy clara" en su posicionamiento y ha señalado que "Rusia no le puede decir a ningún país lo que puede hacer. Y, por ello, la Organización "defenderá a cualquier país que quiera entrar", ha asegurado. 

La Casa Blanca advierte sobre una posible una "respuesta rápida" 

Mientras tanto, prosigue la tensión en la frontera entre Rusia y Ucrania. Este viernes se reúnen en Ginebra los máximos responsables de la diplomacia estadounidense y rusa en un intento por suavizar la situación y evitar la invasión rusa en el este de Ucrania. La Casa Blanca advierte de que un movimiento así tendrá serias consecuencias. 

"Si las tropas rusas cruzan la frontera se encontrarán con una respuesta rápida y severa de los Estados Unidos y sus socios europeos", ha vuelto a advertir este jueves el Secretario de Estado, Antony Blinken. 

El Kremlin ve en estas palabras un elemento más de desestabilización y quiere garantías de que Ucrania no se integrará en la OTAN, mientras mantiene el despliegue de 100.000 soldados en la frontera.   

Consciente del riesgo real de invasión rusa, Ucrania anuncia ejercicios militares cerca de Crimea y su presidente, Volodímir Zelenski, pide a la población no entrar en pánico y confiar en el ejército.