Altos cargos del Gobierno de Lambán defienden que la implantación de renovables se hizo según la legislación

Este viernes han continuado los trabajos en la comisión que investiga la implantación de las energías renovables en Aragón. Entre los comparecientes, varios cargos del anterior Gobierno de Aragón, presidido por Javier Lambán, quienes han asegurado que los trámites que seguían los proyectos cumplían con la legislación vigente y que no recibieron presiones políticas para agilizarlos.

El que fuera jefe de servicio de Gestión Energética del Ejecutivo autonómico hasta el año pasado ha negado rotundamente presiones políticas, aunque ha reconocido que sí había empresariales. “Los funcionarios han tenido que dar el callo, lo digo claramente, pero trabajando con rigurosidad. El promotor siempre ha venido presionando, pero eso no implicaba saltarse procedimientos ni pautas”, ha afirmado Eduardo Pérez.

Pérez también ha explicado que la práctica de trocear un parque eólico, es decir, dividirlo en parques más pequeños a la hora de pedir los permisos, no suponía que los controles ambientales fueran menores. 

Antes, la sesión de este viernes la ha abierto el catedrático de geología José Luis Simón. Ha hablado de estudios de impacto ambiental benévolos, actuaciones contradictorias del Inaga, dificultades para que los ciudadanos pudieran dar su opinión y falta de rigor en los proyectos. Cree que todas las administraciones han contribuido a que no haya un despliegue ordenado de las renovables. “Han hecho en muchas ocasiones dejación de responsabilidad en el desarrollo normativo y en el despliegue, mucha permisividad en cuanto al contenido y calidad de los proyectos. En algunos momentos, la administración debería sentir que se están burlando de ella algunas empresas”, ha denunciado.