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ANIVERSARIO

Zaragoza homenajea a Ana Isabel Herrero 16 años después de ser asesinada por los GRAPO

El Ayuntamiento enmarca el acto en el compromiso con la memoria de las víctimas del terrorismo

ARAGÓN NOTICIAS/EUROPA PRESS /
Un momento del homenaje celebrado este domingo en Zaragoza. / Europa Press
icono foto Un momento del homenaje celebrado este domingo en Zaragoza. / Europa Press

El Ayuntamiento de Zaragoza ha colocado este domingo, 6 de febrero, una placa en la calle Cervantes número 11, para homenajear a Ana Isabel Navarro, en el 16 aniversario de su asesinato a manos de miembros de los GRAPO (Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre).

En este acto conmemorativo han estado presentes el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, la concejala delegada de Víctimas del Terrorismo, Patricia Cavero, y el viudo de Navarro, Francisco Colell, entre otros.

El 6 de febrero de 2006, sobre las 21:00 horas, tres individuos --Xurxo García, Israel Clemente y el cabecilla, Juan García Martín-- abordaron al empresario Francisco Colell y a su esposa, Ana Isabel Navarro, cuando intentaban salir en coche de su garaje ubicado en la calle Cervantes de Zaragoza.

Los terroristas, que se identificaron como miembros de la citada banda terrorista, amenazaron a la pareja y le comunicaron que quedaría retenida hasta el pago de una recompensa económica. Pero la entrada de otro vehículo en el garaje dio pie al matrimonio a intentar una huida que fue abortada por los disparos de los pistoleros, que hirieron a Colell y provocaron la muerte de Herrero, quien acabó siendo la última víctima mortal de los GRAPO.

Los tres terroristas acabaron siendo detenidos y, en 2009, fueron condenados por la Audiencia Nacional a penas de entre 79 y 82 años de prisión por un delito de asesinato terrorista consumado y de otro en grado de tentativa, así como de dos de detención ilegal. 

En su discurso, el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha recordado que el día que la asesinaron, Ana Isabel Navarro tenía 44 años y "le quitaron lo más valioso que tenemos, la vida".

El alcalde ha defendido la celebración de este acto conmemorativo para "dejar un testimonio permanente" del "terror" y el "dolor" que han ocasionados los terroristas en la historia de Zaragoza y de España.

También, ha dicho que su equipo de gobierno, a través de su concejalía de Víctimas del Terrorismo, desde junio de 2020, ya ha colocado seis de las once placas previstas para recordar atentados perpetrados en la ciudad y dignificar a las víctimas. Se pretende completar el resto a lo largo de este año, ha añadido Azcón.

Asimismo, ha comentado que la sociedad "tenemos una deuda" con las víctimas del terrorismo y, por ello, cada año es "necesario que se les recuerde" para "neutralizar el discurso manipulado de aquellos que todavía defienden a los terroristas y los blanquean".

En ese sentido, Azcón ha considerado que se trata de un deber "más necesario que nunca" ante la presencia de Bildu, "un partido que sigue nutriéndose en sus filas directivas de lo que han sido asesinos y criminales y el hecho de de que "los herederos de ETA siguen glorificando a los terroristas en homenajes públicos a etarras excarcelados".  

Acto para no olvidar la barbarie

La concejala de Víctimas del Terrorismo del Ayuntamiento de Zaragoza, Patricia Cavero, ha apostillado que estos homenajes son "imprescindibles" para que "nunca se olvide el infinito dolor que han causado" los terroristas y, sobre todo, para que "los más jóvenes" conozcan el "relato verdadero y nunca lo olviden".

Patricia Cavero ha subrayado que desde la concejalía a la que está al frente se lleva dos años recordando a estas personas a las que se les arrebató la vida "de forma injusta". "Es nuestra obligación como Ayuntamiento y como sociedad, porque queremos vivir en paz y en libertad", ha dicho.

Por su parte, el viudo de Ana Isabel Navarro, Francisco Colell, ha agradecido el apoyo de la Corporación municipal zaragozana, ya que "es un momento especial para traer al presente la memoria de mi mujer". Ha destacado la importancia de "mantener palpitante la memoria" de su esposa y de todas las víctimas que fallecieron a manos de grupos terroristas. Por último, ha sentenciado: "Seguro que mi mujer desea paz, sosiego y esperanza para que el terror no vuelva a atacar a Zaragoza".

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