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Bigotes sobre ruedas por una buena causa
El movimiento 'Movember' organiza este sábado una marcha cicloturista para ayudar a la unidad de prevención del suicidio en Aragón
Diferentes hombres lucen orgullosos sus bigotes. (PIXABAY)Se habrán fijado por la calle, ahora que la mascarilla decae en exteriores: el bigote, ese rara avis de la estética masculina, aflora estos días en los rostros de algunos varones que vencen el reparo de una tendencia demodé. Muestran así su solidaridad con el movimiento 'Movember' (contracción de 'moustache' y 'November'), una iniciativa mundial que promueve una vida saludable, feliz y duradera para los hombres a partir de la prevención de enfermedades como el cáncer de próstata y testículos, así como el suicidio.
De cómo un gesto simpático fraguado entre cervezas acaba convirtiéndose en una de las 30 oenegés más importantes del mundo, pueden dar cuenta tres amigos australianos que, en 2003, para aliviar el pesar de uno de ellos por el cáncer de próstata recién diagnosticado a su padre, acordaron dejarse mostacho durante el mes de noviembre en homenaje a sus progenitores.
El dinero recogido de sus más cercanos por eliminar esa antigualla de sus rostros iluminó una bombilla que, de primeras, no vieron en la asociación contra el cáncer de Melbourne. El cheque de 60.000 dólares australianos entregados al año siguiente (al cambio de estos días, unos 38.500 euros) ayudó a comprender la magnitud real del movimiento: 83,5 millones de euros recaudados en iniciativas locales desarrolladas durante los últimos 15 años en una veintena de países, que han permitido financiar unos 1.250 proyectos en favor de la salud masculina (datos hasta 2020).
La que se desarrolla este fin de semana en la provincia de Zaragoza, bautizada como “La Movember 2021”, está impulsada por el urólogo Jorge Rioja, y viene sobre ruedas y llena de historias. Las que atesoran el gran Miguel Induráin y el aragonés Carlos Hernández, en tiempos gregario y líder respectivamente en el histórico Reynolds, compañeros habituales de habitación y para siempre amigos, que este viernes compartieron recuerdos y vivencias en una animada charla coloquio de carácter benéfico en el restaurante El Cachirulo, en la que también hubo tiempo para abordar el estrés en el deporte de élite y la prevención del suicidio.
Para este sábado, la cita grande, una marcha cicloturista encabezada por los dos ex rodadores profesionales que, dividida en dos grupos, completará desde las 9:00 horas la tradicional ruta Goya (Zaragoza- Cuarte-Cadrete-María-Botorrita-Muel-Mezalocha-Villanueva de Huerva- Fuendetodos-Jaulín-Botorrita-Zaragoza) y, desde las 10:00 horas, la subida al Alto de la Virgen de La Dorleta, patrona de los ciclistas y ubicada en el monte de Jaulín.
Por una buena causa
La iniciativa benéfica, que ya lleva recaudados algo más de 8.000 euros y pretende alcanzar al menos la barrera de los 15.000, tiene como objetivo único ayudar al equipo de prevención del suicidio en Aragón que forman las psiquiatras Eugenia González, Isabel Irigoyen y Maite Lanzán.
“La idea es darles gasolina para trabajar en una labor tan necesaria como es la prevención del suicidio. Queremos conseguir financiación suficiente para que se puedan permitir tener un becario que les ayude en las muchas acciones que desarrollan por su cuenta”, explica Rioja.
Una pretensión “muy ambiciosa”, casi una “ensoñación”, para la psiquiatra integrante de la unidad Eugenia González, que asegura conformarse “con mucho menos”. Junto a sus compañeras, dedica parte de su tiempo libre a la divulgación, la prevención y la formación a cerca de cómo abordar la cuestión del suicidio y cómo prevenirlo.
Un campo yermo en el que, asegura, hay trabajo de sobra por hacer, en paralelo al desarrollo de la Estrategia de Prevención del Suicidio puesta en marcha por el Gobierno de Aragón.
Prevenir el drama
González ve todo el sentido a centrar en los hombres la acción benéfica relativa a la salud mental y la conducta suicida por cuanto, según apunta, en España, la tasa de suicidios del hombre es tres veces mayor que la de las mujeres. Y porque ellos sufren un “estigma mayor” por esa idea errónea de “la fortaleza de la masculinidad” y “la debilidad” que se asocia a quien sufre una depresión, u otro problema de salud mental.
El mal afecta especialmente a varones de edad avanzada. En ese sentido, la psiquiatra considera un punto importante los avances logrados en materia de prevención del cáncer de próstata, que han llevado a lograr un mejor pronóstico de los casos detectados.
Y, pese a efectos tan perniciosos derivados de la pandemia como la soledad, el aislamiento social, el desarraigo familiar y la propia incertidumbre ante tanta alerta de peligro, González recuerda lo importante que resulta contar con una “red de apoyo” formada por personas de confianza con la que compartir las emociones.
Una persona que siente que la vida ya no merece la pena y a la que le ronda en la cabeza la idea del suicidio, explica González, puede ser ayudada con un mensaje en positivo, porque “no quiere dejar de vivir, lo que quiere es dejar de sufrir”, explica. “No es un bicho raro, ese sentimiento existe y los servicios sanitarios están para dar una respuesta y ofrecer ayuda”, asegura.
Una asistencia muy necesaria también para los jóvenes, cuya primera causa de mortalidad ya es el suicidio en la franja de edad entre 15 y 29 años, según datos de 2019 de la Fundación Española para la Prevención del Suicidio, y para las familias de quienes han acabado con su vida.