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DOS MESES DESPUÉS

La Palma urge la llegada de las ayudas prometidas para recuperar las viviendas

Algunos de los hoteles de la isla han cambiado a los turistas por vecinos afectados por la erupción del volcán

ARAGÓN NOTICIAS /
icono foto Una casa bajo la ceniza del volcán. / Foto: EFE/Elvira Urquijo Á.

La erupción del volcán de Cumbre Vieja cambió la vida de los palmeros. El turismo y el cultivo de plátanos se han visto duramente afectados y 2.300 personas continúan viviendo en hoteles o alojados en casas de familiares. La isla canaria está inmersa en su reconstrucción.

Dos meses después de que los científicos dieran por finalizada la erupción del volcán, todavía siguen saliendo humo y gases de Cumbre Vieja.

La vida de los vecinos de La Laguna quedó paralizada por completo el pasado 19 de septiembre. Más de 1.200 hectáreas fueron arrasadas por la lava, 73 kilómetros de red viaria desaparecieron y cientos de vecinos han perdido sus viviendas.

Ahora, los trabajos de reconstrucción se centran en devolver el servicio de carreteras y dar un alojamiento a todas aquellas personas que todavía no han podido regresar a sus casas.

Milagros es una de ellas. Lleva cuatro meses junto a su marido alojada en un hotel. "Estábamos en preaviso, sí. Como vimos que estaba ya el volcán funcionando salí con lo puesto, con lo puesto nada mas y el pastillero. Salí porque mi casa se movía", recuerda. 

Los hoteles, de alojar turistas a palmeros

En esta situación continúan más de 2.000 personas todavía. El director del hotel Princess La Palma, Javier Bellido, en el que se aloja Milagros, es de Zaragoza. El 90% de sus clientes son ahora palmeros. "Hemos pasado de tener un tipo de cliente turístico, básicamente turístico, al desaparecer ese turismo y acoger aquí a gente desalojada que ha perdido sus casas o que, de momento, no puede regresar", cuenta.

Poco a poco van llegando las ayudas, pero no son suficientes. Solo en Los Llanos de Aridane la lava se ha tragado 400 casas. El Ayuntamiento busca pisos para alquilar y se están acondicionando espacios para instalar viviendas modulares. Pero a esto se le suma que muchos se han quedado sin empleo.

"Más del 80% del PIB de esta isla es del sector platanero. Por eso, para nosotros, se hace indispensable buscar alternativa para todas esas personas, para que puedan trabajar en la isla de La Palma", reclama la alcaldesa, Noelia García.

Y aunque sus vidas y su paisaje ya no volverán a ser los de antes, solo piden salir cuanto antes de este mal sueño.