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GUERRA UCRANIA

Los mercenarios de Wagner aceptan detener su marcha hacia Moscú para negociar

Una decisión que llega tras la mediación del presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko, según asegura su Gobierno. Mientras tanto, el alcalde de Moscú, califica la situación de muy "difícil", y decreta el lunes como día no laborable

ARAGÓN NOTICIAS / AGENCIAS /
icono foto Moscú se blinda ante una posible amenaza.

El jefe del grupo de mercenarios rusos Wagner, Yevgueni Prigozhin, que encabeza una rebelión armada contra la cúpula militar rusa, ha aceptado detener su marcha hacia Moscú e iniciar negociaciones, según fuentes de Bielorrusia, tras una mediación del presidente del país, Alexandr Lukashenko. El motivo, asegura, es evitar un derramamiento de sangre. "Comprendiendo toda la responsabilidad de que se derrame sangre rusa por una de las partes, nuestras columnas dan media vuelta y regresamos a nuestras bases de acuerdo al plan", ha afirmado en un mensaje de audio en su canal de Telegram.

El grupo Wagner, formado por unos 25.000 hombres, avanza a lo largo de toda la jornada con varias columnas de combatientes hacia Moscú, y se encuentra a unos 400 kilómetros de la capital, tras tomar bajo su control la ciudad rusa de Rostov del Don. Una rebelión armada que el líder de Rusia, Vladímir Putin, ha calificado de traición y que, asegura, será sofocada para evitar una nueva guerra civil.

El grupo se revuelve contra el Kremlin porque el Ministro de Defensa ruso ordenó bombardear sus bases, según asegura su líder, provocando muchas víctimas.

Putin, por su parte, ha abierto una causa penal contra el jefe de los mercenarios que podría suponerle 20 años de cárcel. Por su parte, Prigozhin ha asegurado que no se va a entregar. "Sobre aquello de traición a la patria, el presidente se equivocó profundamente. Somos patriotas. Hemos combatido y combatimos y nadie piensa entregarse por exigencia del presidente, del Servicio Federal de Seguridad (FSB) o quien sea", ha afirmado Prigozhin.

Moscú, en alerta

Por su parte, Moscú, se blinda ante una posible amenaza. El alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, ha calificado de "difícil" la situación en torno a la capital debido a esta rebelión armada que se va aproximando a la ciudad y ha decretado el lunes próximo día no laborable "para minimizar los riesgos". Ante la posibilidad de que lleguen a Moscú, el Gobierno ruso ha cortado la carretera. Además, varias ciudades rusas, a parte de la capital, han impuesto medidas antiterroristas para reforzar la seguridad.

Reacciones internacionales

La situación podría dar un nuevo giro a la guerra de Ucrania. Su presidente, Volodimir Zelenski, cree que esta situación pone de manifiesto la debilidad de Rusia. Pese a la rebelión interna, han seguido bombardeando Ucrania, y al menos tres personas han muerto y diez han resultado heridas por los restos de un misil que impactó en un edificio de apartamentos en Kiev.

La comunidad internacional, desde EEUU a la Unión Europea (UE) y la OTAN observan de cerca los acontecimientos, que Ucrania interpreta como un signo hacia el colapso del régimen de Putin, y varios países han recomendado a sus ciudadanos que eviten viajar a Rusia y acercarse al centro de Moscú, donde por ahora domina la tranquilidad. La autoridades europeas se han mostrado prudentes, y señalan que se trata de un asunto interno de Rusia.

Y por otro lado, los tres estados bálticos -Estonia, Lituania y Letonia- se mantienen en estrecho contacto con Finlandia y Polonia, mientras refuerzan el control sobre su frontera con Rusia, desde su condición de países que componen el flanco oriental tanto de la OTAN como de la Unión.

Para la inteligencia militar británica, Rusia afronta el "desafío más significativo" en los últimos tiempos y la "lealtad" de sus fuerzas de seguridad serán "clave" para el desenlace de la crisis.

Varios políticos, diputados y líderes regionales rusos han expresado su apoyo a Putin, desde los presidentes de ambas cámaras parlamentarias a gobernadores y jefes de las anexionadas regiones ucranianas, así como el patriarca de la Iglesia ortodoxa, Kirill.