Aprobada la segunda fase del Plan de Recuperación con 22.500 millones de euros

El Consejo de Ministros ha aprobado este martes a la segunda fase del Plan de Recuperación, que incluirá 22.500 millones de euros para la modernización de empresas, especialmente pymes, y 20.000 millones para inversiones sostenibles de comunidades autónomas. Esta adenda permitirá movilizar, además, 84.000 millones de euros en préstamos, con los que se quiere ofrecer una red de seguridad y prolongar, en los próximos años, el actual ciclo inversor. Además, los Perte del chip, del hidrógeno y del agua estarán dotados con 30.000 millones de euros.

La vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, ha confirmado que la fecha límite para el desembolso de los fondos es 2026, de manera que el Gobierno ha "adecuado los hitos y objetivos" para "aprovechar al 100% los recursos con esa fecha máxima", pero ha señalado que los préstamos pueden financiar inversiones "que vayan más allá (de 2026)".

Respecto a los préstamos procedentes de la Comisión Europea, el ministerio insiste en que permitirán una financiación sostenible a un menor tipo de interés que la obtenida por el Tesoro Público y mayores plazos de amortización.

"No nos va a aumentar la deuda pública en 84.000 millones", ha explicado la titular de Asuntos Económicos, que ha indicado que no se solicitarán los créditos "inmediatamente", sino que servirán de "red de seguridad" para poder mantener "en los próximos años y más allá de 2026" un "fuerte impulso inversor público y privado".

Entre las novedades de esos préstamos, destaca el Fondo de Resiliencia Autonómica (20.000 millones de euros para la financiación de proyectos de inversión sostenible), cuya gestión se hará en colaboración con el Grupo del Banco Europeo de Inversiones (BEI).

El objetivo de esta gestión conjunta es "aprovechar la experiencia y conocimiento de la institución europea en la financiación de inversiones de las comunidades autónomas" y "ampliar la capacidad financiera gracias a la cofinanciación de proyectos", ha explicado el Ministerio de Asuntos Económicos.

Por su parte, las empresas dispondrán de 22.500 millones de euros de financiación para la realización de sus proyectos, especialmente en inversiones sostenibles, a través de los diferentes fondos que gestionará el Instituto de Crédito Oficial (ICO).

Dentro de esta línea, el sector del turismo contará con un compartimento de 1.000 millones de euros para la realización de proyectos que permitan un ahorro en el consumo de recursos y una menor generación de residuos.

El apoyo al tejido empresarial se completa con el Fondo Next-Tech, cuya dotación se amplía hasta los 4.000 millones de euros, para seguir facilitando apoyo financiero a empresas emergentes ("startups") españolas en el sector tecnológico en su fase de crecimiento y promoviendo el desarrollo de la innovación y la digitalización.

Perte del chip, del hidrógeno y del agua

El plan estratégico para la recuperación y transformación económica (Perte) de energías renovables e hidrógeno verde, el de digitalización del ciclo del agua y el del chip son los tres proyectos estratégicos más reforzados en la adenda del plan de recuperación, con 4.000 millones de euros más en subvenciones de un total de 7.650 millones adicionales.

Los Perte se llevan todas las transferencias directas adicionales de la adenda aprobada este martes en Consejo de Ministros, así como cerca de 18.000 millones en préstamos del total de 84.000 millones que España podrá solicitar hasta 2026.

La vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, ha explicado que los 30.000 millones de recursos adicionales para los Perte permitirán "dar continuidad y completar las convocatorias de ayudas, financiar incentivos y realizar inversiones adicionales".

Vivienda social

La adenda incluye también un fondo de 4.000 millones de euros en préstamos para impulsar la vivienda social y de alquiler asequible, prometidos por el presidente del Gobierno hace un mes, cuyo objetivo es "incrementar el parque de vivienda en alquiler social o a precio asequible, así como mejorar el parque de vivienda ya existente".

Un segundo fondo incluido en la adenda está dotado con 2.250 millones de euros y pretende "financiar la bonificación fiscal de las inversiones de familias y empresas en transición energética", unas deducciones fiscales que en el caso de la rehabilitación de viviendas llegarán hasta 2024.

En esta adenda se incluyen tres fondos que reforzarán los mecanismos de cohesión social y se creará también el Fondo RED, dotado con 3.000 millones de euros, para preservar el empleo y recualificar a los trabajadores de sectores en dificultades, ha explicado el Ministerio de Economía.