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ZARAGOZA

El rey Felipe VI inaugura este lunes la apertura del Pabellón Puente como sede de Mobility City

El espacio museístico alberga cuatro espacios diferenciados con exposiciones, simuladores de conducción y servicios de movilidad

ARAGÓN NOTICIAS /
icono foto El Rey, a su llegada al Pabellón Puente para inaugurar el Mobility City. / Gobierno de Aragón

El rey Felipe VI ha inaugurado este lunes en Zaragoza el espacio museístico para la movilidad del futuro, Mobility City, ubicado en el Pabellón Puente. La infraestructura, diseñada por la arquitecta Zaha Hadid para la Expo 2008, pretende ser un referente internacional. Será el primer museo de estas características que hay en España y contará, entre otras cosas, con un espacio expositivo interactivo, simuladores de conducción y configuradores de vehículos. Los visitantes podrán ponerse al día con los lanzamientos de productos y servicios de movilidad. 

El Mobility City cuenta con cuatro espacios diferenciados:

  • El futuro de la movilidad: de acceso público, mostrará el avance y potencial en términos de productos y servicios de las empresas asociadas. Una exhibición de propuestas innovadoras que protagonizarán los próximos pasos de la movilidad.
  • Exposición temporal: con una superficie de 1.100 metros cuadrados, es un área para representar la movilidad de ayer, hoy y mañana. La primera exposición muestra la evolución del mundo del automóvil, desde las piezas únicas de los inicios, hasta los futuristas 'concept car', sin olvidar la oferta del mercado actual.
  • Espacio Experiencias: es la zona de entretenimiento que impactará directamente sobre la emoción y la conciencia de los visitantes. Albergará actividades interactivas orientadas a transmitir mensajes de responsabilidad y respeto al medio ambiente, mediante dinámicas que dimensionen el poder de sus decisiones en el porvenir de las ciudades y el entorno que les rodea.
  • Espacio multifunción: pertenece a la zona de acceso público y está dirigido a la realización de actividades y eventos de todo tipo, tanto a nivel profesional como popular. Ofrece desde talleres familiares, ponencias del sector, a premios o presentaciones de los asociados.

La iniciativa Mobility City cuenta con el respaldo y el impulso de más de 50 entidades colaboradoras, tanto relacionados con la movilidad (automoción, telecomunicaciones, energía, logística, etc.), como instituciones locales y estatales (institutos de investigación, asociaciones y universidades).

Un gladiolo sobre el río Ebro

La estructura emula a un gladiolo sobre el río Ebro. La arquitecta iraní que lo diseñó fue la primera mujer en ganar el premio Pritzker -el más importante en el mundo de la arquitectura-, quien llegó a definir el Pabellón Puente como uno de los más importantes de su carrera. Un hito que vio en persona en su visita a la ciudad. Con su rompedor diseño regaló a Zaragoza uno de sus emblemas actuales.

En el momento de su concepción fue necesario soldar más de 29.000 piezas de vidrio, que simulaban las escamas de un tiburón. Una tarea que los constructores hicieron contrarreloj, trabajando incluso de noche para llegar a tiempo a la Expo de 2008. Lo lograron, pero no fue sencillo. 

Debido a la inestabilidad de los suelos fluviales en Zaragoza, se perforó la tierra hasta los 70 metros, la mayor profundidad alcanzada en España para la cimentación de obras. Una labor que disparó económicamente el proyecto, pasando de los 25 millones de euros iniciales a los 35 millones que acabó costando.

El Pabellón Puente fue sin duda uno de los más complejos de la Exposición Internacional y una de las principales entradas al recinto. Sus 270 metros unen ambas orillas del Ebro. 

La estructura, metálica y de hormigón, la cubierta, de cristal de plástico, hicieron en el verano de 2008 que los visitantes que se acercaban hasta la Expo tuvieran en este puente un descanso del calor. La temperatura interior era cuatro grados inferior a la del exterior. Un microclima que evitaba las molestias del sol y del cierzo.

El Pabellón Puente, todo un emblema para la capital aragonesa, renace ahora para lo que fue concebido: un impresionante lugar de paso que acoge en su interior exposiciones y museos.