Casi año y medio después: recreos sin mascarilla y tutorías presenciales

Este jueves, dieciséis meses después, los escolares aragoneses podrán bajarse la mascarilla para jugar en el recreo.  "Por fin, es que corremos y no podemos respirar, ni nos oímos, ¿y en clase cuándo nos la podremos quitar". Es la reacción de Maya, estudiante de quinto de Primaria. Hoy no se hablaba de otra cosa a la salida de los centros escolares en Aragón: se acabaron las mascarillas en el patio.

El departamento de Educación anula la orden que regulaba el uso de mascarillas en los colegios, las tutorías o el acceso de padres al centro, después de que el Consejo de Ministros haya aprobado este martes el fin de la obligatoriedad de su uso en los patios y en la calle. 

El consejero Felipe Faci ha indicado que el índice de riesgo de contagio es muy bajo en los patios de recreo: "Es una interacción en un espacio abierto donde los científicos dicen que el riesgo de contagio es muy bajo". También ha adelantado que se retoman las actividades en los centros, las tutorías presenciales y la posibilidad de que los padres entren en los recintos escolares.

Desde las asociaciones de padres se aplauden la medidas, aunque los profesores las miran con cierto recelo. La Federación de la escuela pública, FAPAR, considera que la nueva situación favorecerá la interrelación de los niños, aunque también puede generar situaciones complicadas en los patios porque no se podrá asegurar la distancia interpersonal. Para su secretaría técnica, Nieves Burón, "es prioritario que los niños puedan tener contacto, relacionarse entre sí, jugar y compartir un momento en un espacio como es el recreo que es muy lúdico y muy necesario para ellos".

Por su parte, la presidenta de la Asociación de Directores de Institutos de Aragón, Eva Bajén, no ve tan clara la medida si hay aglomeraciones y es obligatorio tener la mascarilla puesta: "Nosotros no lo vamos a poder asegurar en los patios porque no podemos tener con cada grupo de estudiantes un profesor o profesora para recordarles que tienen que ponerse la mascarilla".

Por su parte, el colectivo de pediatras considera que debería haberse esperado a que la incidencia descienda. Actualmente está en más de 4.700 casos en menores de 11 años en Aragón. Teresa Cenarro, presidenta de la Asociación Aragonesa de Pediatría de Atención Primaria, cree que en los patios "va a ser imposible mantener la distancia interpersonal", aunque considera que "lo adecuado es que los niños se relacionen". Concluye que, como pediatra que está en una consulta de atención primaria, "hubiera esperado dos o tres semanas".