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CORONA BRITÁNICA

Carlos III y Camila, reyes con corona del Reino Unido

Como es tradicional, el arzobispo de Canterbury ha colocado sobre la cabeza del monarca la suntuosa corona de San Eduardo, del siglo XVII, tras lo cual ha gritado a la congregación 'Dios salve al Rey'. A continuación, Camila ha recibido su corona

ARAGÓN NOTICIAS / AGENCIAS /
icono foto Carlos III y la reina Camila saludan, con otros miembros de la familia real, desde el balcón del Palacio de Buckingham. (EFE//Neil Hall)

Carlos III ha sido coronado como rey del Reino Unido en una solemne ceremonia que se ha celebrado este sábado en la abadía de Westminster, en el corazón de la capital británica, con toda la pompa y boato que marca la tradición.

En el momento más importante de este acto protocolario, el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, ha colocado sobre la cabeza de Carlos III la suntuosa corona de San Eduardo, del siglo XVII.  Tras colocarle la pieza, el arzobispo ha gritado a la congregación 'Dios salve al Rey', tras lo cual se han escuchado las trompetas.

Sentado en la silla de roble de San Eduardo, considerado el mueble más antiguo del Reino Unido y colocado sobre un piso de mosaico medieval, Carlos III ha sido coronado a los 74 años de edad, tras recibir las distintas insignias reales, que simbolizan las responsabilidades como el jefe de estado británico hasta el día de su muerte.

Al rey se le ha entregado el orbe del soberano, que simboliza el mundo; el cetro con cruz, que representa el mundo cristiano; y el cetro de la paloma, símbolo del papel espiritual del monarca.

Ataviado con una capa dorada, el primado de la iglesia de Inglaterra le ha entregado al rey el guante blanco del poder.

Por último Welby le ha colocado la corona de San Eduardo, hecha en oro y decorada con rubíes, amatistas, zafiros, granate y topacios, la única vez en su vida que el monarca la llevará.

Antes, el monarca ha sido ungido con aceite consagrado por el arzobispo de Canterbury, el rito religioso más solemne de la liturgia de la coronación, que requiere que el monarca esté temporalmente oculto al público.

El soberano ha quedado velado por un panel de tela bordada con motivos de ángeles y un árbol con 56 hojas que representan a cada uno de los países de la Mancomunidad Británica de Naciones, bendecida en la Capilla Real del palacio de Saint James hace una semana.

Reina Camila

A continuación, ha sido el turno de Camila, que primero ha sido ungida con aceite en la cabeza por el arzobispo de Canterbury, quien posteriormente ha impuesto en su cabeza la corona de la Reina María. De esta forma, deja ser llamada reina consorte, para pasar a ser considerada únicamente como reina.

La reina Camila ha sido coronada este sábado. 

Alrededor de 2.300 invitado han asistido este sábado a la ceremonia, entre ellos un centenar de jefes de Estado y por primera vez reyes de otros países, como don Felipe y doña Letizia de España, que comparten parentesco el recién coronado Carlos III.

Los reyes Felipe VI y Letizia, a su llegada a la abadía. (EFE/ Andy Rain)

Ausencias en el balcón del palacio

Tras su regreso al palacio de Buckingham, Carlos III ha salido al balcón, para saludar a la multitud que se agolpaba allí, junto a la reina Camila y sus familias, pero sin su hijo menor Enrique, apartado de las funciones oficiales de la realeza, que sí ha estado presente durante la ceremonia, en la abadía de Westminster

Tampoco ha aparecido en el balcón el príncipe Andrés, hermano de Carlos III, a quien también se apartó de la familia real por sus escándalos sexuales relacionados con el empresario Jeffrey Epstein.

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