Balance satisfactorio entre los hosteleros aragoneses, rozando el completo en muchas zonas

Este domingo termina una Semana Santa que, a pesar de las lluvias, ha sido satisfactoria para el sector hostelero. En las tres provincias aragonesas se han cumplido las expectativas y en muchas zonas se ha llegado casi al 100% de ocupación. 

Un ejemplo de buenas cifras se encuentra en el Monasterio de Veruela, donde el balance se resume en que han tenido que programar más visitas de lo habitual porque, dicen, la demanda ha sido superior a sus previsiones.

Desde el jueves, por allí han pasado unas 2.500 personas. La mayoría son grupos grandes, de amigos o de familiares, de hasta 15 personas. Algunos se han ido moviendo por distintos puntos de la Comunidad, aunque la mayoría han pasado las vacaciones en las casas rurales de la zona. Sobre todo, ha sido un turismo nacional, que buscaba una escapada a un entorno natural, pero que además tuviera cerca patrimonio, señalan en el monasterio.

"Todas las visitas han estado completas. Aunque el tiempo no ha sido muy bueno, no lo hemos notado y hemos tenido entre 500 y 600 personas cada día", comenta una de las guías de la zona. 

Visita guiada este domingo al Monasterio de Veruela. 

La mayoría de los grupos que han elegido la zona del Moncayo para esta Semana Santa son grandes. Han pasado estos días en alojamientos rurales, predominando el turista nacional, aunque las visitas llegan desde toda Europa.

En Tarazona y el Moncayo, la ocupación ha sido prácticamente del 100%. Un cartel de completo que han podido colgar también en todos los valles del Pirineo y en el Bajo Aragón, el Matarraña y el Maestrazgo. En la sierra de Guara han capeado el temporal. Allí, los turistas han tenido que cambiar el neopreno por el paraguas: "Veníamos a hacer barrancos y deporte, pero el tiempo no nos ha dejado y estamos haciendo turismo convencional".

En Alquézar, han vuelto a ser miles las personas las han recorrido sus calles empedradas, que han rozado el 90% de ocupación. "En Semana Santa siempre viene gente y esta vez no han faltado", señala un hostelero de la localidad oscense.

Las ciudades de Huesca y Zaragoza ha logrado llenar el 70 y 80% de sus plazas hoteleras, en una Semana Santa que en la capital turolense ha sido agridulce debido a la meteorología.