Aragón apuesta por administrar la cuarta dosis en otoño mientras otra autonomías quieren hacerlo ya

La comisión de Salud Pública ha debatido esta jueves en Madrid acerca de cuarta dosis de refuerzo de la vacuna contra la COVID-19 para los mayores de 80 años. Si bien todas las comunidades coinciden en que es necesario ponerla, no están de acuerdo en cuando, por lo que el debate sigue abierto. Los técnicos de la ponencia de vacunas creen que debe retrasarse hasta final de año porque, aseguran, es la época donde aparecen más virus respiratorios y se espera que haya vacunas más eficaces contra las nuevas variantes que van surgiendo. 

Es el caso de Aragón, que apuesta por administrarla en otoño. Sin embargo, territorios como Andalucía o Asturias quieren hacerlo ya ante el aumento de casos.

En Aragón, la dosis adicional ya se ha puesto a las personas inmunodeprimidas y ahora se quiere seguir reforzando a los más vulnerables. "Cuando se decida que se tienen que vacunar, que es bueno, que es beneficioso, que es necesario, nosotros pondremos a disposición todo el departamento y todas las residencias para que esa vacunación sea una realidad", ha indicado la consejera de Ciudadanía, María Victoria Broto.

El virus sigue incidiendo en este colectivo, desde hace una semana se han producido siete nuevos brotes, dejando un total de 19 en este momento, aunque no todos son en centros de mayores.  "La incidencia en este momento no es grande ni preocupante. Es verdad que tenemos brotes pero podemos decir que no son de gravedad, las personas positivas no tienen sintomatología grave y lo estamos gestionando con normalidad", ha asegurado Broto. 

El aumento de los brotes va ligado al auge de los positivos. Hace una semana se registraban más de 2.900 contagios y en los últimos siete días la cifra supera los 3.000. El número de fallecidos también está al alza: en el último mes han muerto 61 aragoneses, 18 de ellos en la última semana.