Fran Escribá es el elegido por el Real Zaragoza

Fran Escribá es el elegido. El técnico valenciano será el encargado de dirigir al Real Zaragoza. El técnico valenciano firmará su contrato hasta 2024 y vendrá acompañado de su segundo, el exzaragocista David Generelo, y el preparador físico, Julen Masach. En su comunicado, el Real Zaragoza se ha mostrado convencido de que la elección de Escribá es acertada: "Fran Escribá, un entrenador con gran experiencia, es el elegido para liderar nuestro proyecto deportivo y reconducir el rumbo en LaLiga SmartBank. El técnico valenciano defenderá el escudo del león después de una década entrenando en diversos banquillos de Primera División, a la cuál llegó tras una campaña histórica con el Elche que le valió para ascender. Llega así un técnico de primer nivel capacitado para impulsar el crecimiento de Real Zaragoza".

Escribá acepta el reto del Real Zaragoza un año después de su última experiencia, en el Elche, equipo que es con diferencia al que más ha entrenado, en total en cinco temporadas. En total, ha dirigido en el fútbol profesional a cuatro equipos: Elche, Celta, Villarreal y Getafe. Nueve temporadas en total en Primera División y una en Segunda, la de su debut en el Elche, que se saldó con ascenso a Primera División. 

Nacido en Valencia hace 57 años, Escriba dio sus primeros pasos como entrenador en las categorías inferiores valencianistas, donde también coordinó la sección de fútbol base. Posteriormente, con 39 años pasó a formar parte del equipo técnico de Quique Sánchez Flores haciendo las labores de segundo entrenador. Era la temporada 2004-2005, con un Getafe recién ascendido a Primera División, e hicieron una gran campaña. Los azulones quedaron en el puesto 13 y no sufrieron para no bajar. Esto hizo que el curso siguiente el Valencia pusiera sus ojos en Sánchez Flores y por tanto de Escribá, en el que fue su regreso al club ché. 

En Mestalla estuvieron dos años y medio, hasta la destitución de Quique Sánchez Flores en noviembre de 2007. Un tercer puesto en 2005 y otro cuarto en 2006 y unos cuartos en Champions League fueron lo más destacado a nivel de resultados. Los siguientes retos del cuerpo técnico fueron el Benfica y el Atlético de Madrid, club al que cogieron en la temporada 2009-2010 en la jornada 9, más cerca del descenso que de Europa, y al que revitalizaron llevándolo a ganar la Europa League y a la final de la Copa del Rey. Un año después, Quique Sánchez Flores abandonó el club colcohonero y Escribá decidió 'volar' por su cuenta.

Así, en 2012 coge las riendas del Elche, al que ascendió a Primera División en un año mágico en el que ascendieron con soltura. Ahí coincidió con el exzaragocista David Generelo, que fue pieza clave desde el centro del campo en el éxito del proyecto. Desarrollando un fútbol práctico y rápido, con jugadores que destacaron como Fidel, Coro, Carlos Gil o la 'Roca' Sánchez, Escribá asentó al Elche en Primera, pero en 2015 el conjunto descendió a Segunda en los despachos después de quedar en el puesto 13 con 41 puntos. Getafe fue su siguiente proyecto, en un mal año: fue destituido en la jornada 32, penúltimo y a dos puntos del descenso y el equipo madrileño descendió a Segunda. "Nunca llegué a controlar el vestuario, ni siquiera en los buenos momentos", afirmó el entrenador tiempo después en una entrevista. 

Un año más tarde, se enroló en el Villarreal, con el que cosechó grandes resultados en su primera temporada. Bajo su dirección el equipo finalizó en quinta posición:  el entrenador valenciano logró la meritoria cifra de 67 puntos. No tuvo tanta suerte en su segundo año, cuando fue destituido en la jornada siete tras tres victorias, tres empates y una sola derrota. En la temporada 2018-2019 llegó a mitad de temporada para salvar al Celta de Vigo, equipo que le destituyó el curso siguiente; misma historia con el Elche: en febrero de 2021 regresa con el equipo a tres puntos de la salvación y consigue la machada de lograr la permanencia. Meses después, fue destituido. 

Ahora, llega al Real Zaragoza casi 10 años después de su último reto en Segunda División, con ese gran recuerdo del ascenso y un reto mayúsculo dada la situación clasificatoria del club aragonés y sus problemas de juego.