Seguridad y tecnología en casa para disfrutar de unas vacaciones de Semana Santa sin sustos

La Semana Santa es sinónimo de procesiones, pero también de vacaciones. Muchos aprovechan para disfrutar de las primeras escapadas del año, gracias a los cuatro días festivos que regala el calendario. Antes de subirse al coche conviene revisar el estado en el que se deja la vivienda para prevenir sustos. "Es importante dejarla con unos signos mínimos de habitabilidad", aconseja el portavoz de la Policía Nacional en Aragón, Rubén Nido. 

Para alejar lo máximo posible a los ladrones, es recomendable dejar las persianas a medio subir, en lugar de bajadas del todo, ya que suele ser síntoma de una casa vacía. "La domótica puede ayudarnos en este caso. Con una aplicación en el móvil, y una mínima inversión, podemos controlar las luces, encenderlas y apagarlas o subir y bajar las persianas", señala Nido. 

Que un familiar o un vecino se encargue de colocar bien el felpudo, retirar la publicidad o cartas del buzón son pequeños gestos que también ayudan a evitar que una vivienda se convierta en objetivo de las bandas organizadas. 

"Hay que sumar a todo lo anterior el vigilar las puertas de entrada. Hay bandas que marcan las puertas con un fino hilo de silicona o con un trozo pequeño de plástico, que al abrir se cae al suelo. Si se mantiene varios días, les indica que esa casa está vacía en ese momento y que es un blanco fácil", comenta Nido, que recomienda alertar al 091 en caso de encontrar puertas marcadas: "Se desplazará una patrulla para inspeccionar el edificio y, en caso de confirmarse, se abre una investigación para pillar a los ladrones". 

La tecnología es la gran aliada para mejorar la seguridad de los hogares ante visitantes indeseados. Con un simple sistema de cámaras de vigilancia en el interior, se puede reducir el riesgo de ser presa de los ladrones. "Si ven movimiento, hay que llamar a la policía y acudirá una patrulla al domicilio", recalca el agente. 

Esas cámaras de seguridad deben instalarse en el interior de la vivienda, preferiblemente enfocando a la puerta de acceso y si es con sensor o detección de movimiento, mejor. "Es un sistema de seguridad, pero no impide que los cacos entren. No previene ni asegura el domicilio", señala Rubén Arias, encargado de Seguridad en la cerrajería zaragozana Hermanos Justo. 

"Nos decantamos por la puerta blindada. Es lo más seguro"

Entre las medidas que se han puesto de moda están las mirillas digitales, que permiten grabar, hacer fotos o ver a la persona que está al otro lado. Como pasaba con las cámaras de videovigilancia, son sistemas que aportan seguridad a la persona, pero no impiden los robos. A eso se suma que su instalación depende del visto bueno unánime de la comunidad de propietarios, ya que la toma de imágenes interfiere con la Ley de Protección de Datos. 

Eso fue lo que echó para atrás a Luis Sánchez y Marta Broto, una joven pareja que compró su vivienda hace unos meses en el barrio del Actur. "Queríamos poner una mirilla digital para más seguridad. Tenemos una puerta antigua y era un parche hasta que la pudiéramos cambiar por una mejor. Al saber que tenía que estar de acuerdo toda la comunidad, decidimos optar por otra cosa. Era demasiado jaleo para una mirilla", cuenta él.

Por eso, desde Hermanos Justo recomiendan invertir en sistemas que se instalan directamente en las puertas. "Lo que aumenta la seguridad es el bombín de la puerta", asegura Arias. "Es de lo que más vendemos. Los bombines 'anti-bumping' porque evita robos violentos y ralentiza a los ladrones", indica. 

Los robos más comunes son los denominados "de tres minutos", por eso, la seguridad se mide en tiempo. "Cuanto más tiempo les cueste entrar, más seguro es. Los ladrones ante una puerta con doble llave o doble bombín, blindada, van a preferir otra más simple porque el acceso es más rápido", explica el cerrajero. 

Esa explicación fue la que llevo a los nuevos propietarios a decidirse por cambiar la puerta: "Al final, nos decantamos por una puerta blindada. Nos parecía que, aunque la inversión es mayor, es lo más rentable y lo que más seguridad nos aporta. Además, no necesitamos el visto bueno de nadie".

Tosa seguridad ayuda a alejar a los ladrones, que muchas veces no saben lo que se van a encontrar en la vivienda, insiste el cerrajero: "Los robos ciegos, que son muy comunes, necesitan ser rápidos, porque no les compensa perder mucho tiempo, en el que les pueden pillar con las manos en la masa, para luego no saber si va a merecer la pena lo que van a encontrar".