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INFANCIA

Las listas de nacimiento, una opción cada vez más demandada para aliviar los gastos del primer año de un bebé

Con la llegada de cada nuevo miembro, una familia desembolsa, de media, más de 7.700 euros durante el primer año, según un estudio de la OCU

L. B. /
Según un análisis realizado por la OCU, los gastos de los primeros doce meses de un bebé superan los 7.700 euros. / Pixabay
icono foto Según un análisis realizado por la OCU, los gastos de los primeros doce meses de un bebé superan los 7.700 euros. / Pixabay

Aliviar el esfuerzo económico que los padres tienen que hacer durante el primer año de vida del niño. Este es uno de los motivos que explican la popularización de las listas de nacimiento, una opción cada vez más demandada que, en palabras de los responsables de las tiendas especializadas, implica un "acierto seguro". Según un análisis realizado por la OCU, los gastos de los primeros doce meses de un bebé superan los 7.700 euros.

El informe 'Un hijo, un lujo' de la organización de consumidores señala que, con la llegada de cada nuevo miembro, una familia gasta, de media, 642 euros al mes, entre los que se encuentran los destinados a la ropa y enseres del niño, además de los relativos a su cuidado. "Últimamente se ha incrementado bastante la demanda de las listas de nacimiento. Son muchos los papás que recurren a este servicio y los que no lo conocían, al explicarles cómo funciona, suelen decidirse casi de forma inmediata. Es una manera fácil y cómoda de acercarse a todas las personas que quieren regalar", explica Susana Sánchez, copropietaria de la tienda zaragozana Gemelicos. Un auge que también corroboran desde El Corte Inglés, donde llevan más de dos décadas ofreciendo este servicio, aunque señalan que todavía se encuentran por detrás en número de usuarios de las listas de bodas y comuniones. 

Sobre los beneficios de este tipo de inventarios, la copropietaria de Gemelicos indica: "Son comodísimas tanto para los papás como para los familiares y amigos que quieren regalar alguna cosita al bebé o bebés recién nacidos. Saben que van a acertar seguro con la compra, porque los productos los han elegido personalmente los padres, y que no van a repetir". "Las listas de nacimiento hacen que los regalos siempre sean personales", argumenta Sánchez.

Además de en sus establecimientos físicos, muchas de las tiendas infantiles que ofrecen este servicio también lo hacen a través de la web. "Publicamos las listas en internet y, así, tranquilamente desde casa, se pueden ver todas las opciones y elegir. Viene genial para los familiares y amigos que viven fuera del lugar de nacimiento de los pequeños".

Cuando Ángel Sánchez, de 35 años, tuvo a su primer hijo, Luca, lo tuvo claro. "Tanto los amigos como la familia me preguntaban qué necesitábamos y la verdad es que nos vino genial para poder poner cosas como el carro, la cuna o la hamaquita... Además, nos pilló viviendo en Barcelona, con lo cual todos los amigos aragoneses lo tenían más fácil de esta forma", cuenta. "Sin lista seguramente nos habríamos llenado de ropa de bebé y pijamas que, a veces, ni siquiera son de tu propio gusto. Creo que esta opción ayuda mucho a los padres y también facilita a los que compran el regalo porque, además, no tienen por qué comprar un producto entero, sino que pueden poner el dinero que quieran para cualquiera de las cosas de la lista", añade. 

Los productos más pedidos

En el ranquin de los productos más pedidos por los padres se encuentran "la cuna, la trona y el carrito, y, en general, todo lo que forma parte del 'ajuar' del niño", afirman desde El Corte Inglés, y especifican: "En lugar de pagar por el producto entero, ya que su coste suele ser elevado, pueden contribuir financiando una parte".  "Últimamente se llevan mucho los 'packs' de cuna. Conjuntos preparados que lo llevan todo: cunita, colchón, edredón, protector, sábanas... También las sillas de coche y sus complementos", añade la copropietaria de Gemelicos.

Para Sofía Forcén, madre de Macarena, una bebé de tres meses, "las listas de nacimiento son una opción superútil". "Al final, la gente siempre acaba regalando lo mismo y se acumulan un millón de cosas que no se van usar, como chupetes o ropa, que, al final, es algo que se les queda pequeño muy rápido", explica Forcén, quien, además, agrega otro beneficio: "Así nos ahorraríamos el sobreconsumo".