La nueva EvAU valorará más la capacidad de los alumnos para aplicar lo aprendido que la memorización

Menos memoria y más creatividad. Las faltas de ortografía, la presentación y la coherencia valdrán un 10% de la nota en la nueva selectividad que se implantará en 2025. Es una de las ideas que están detrás de la nueva EvAU. Así se explica en el borrador del Real Decreto por el que se regulan los requisitos de acceso a la universidad, que trae además otras novedades importantes.

El contenido seguirá mandando, pero la forma gana así protagonismo. El examen se adaptará a la última reforma educativa, conocida como Ley Celáa: dará un giro para alejarse del aprendizaje basado en la memorización y valorar sobre todo la capacidad de los alumnos para aplicar los conocimientos y encontrar soluciones creativas.

Se busca que los estudiantes demuestren una madurez intelectual y un pensamiento crítico. Para ello, las preguntas se contextualizarán en entornos que les resulten familiares y faciliten unas respuestas aplicadas a casos reales.

Otra de las novedades es que sólo habrá un modelo de ejercicio. Algunas tareas podrán dar a elegir entre diferentes preguntas, pero siempre que se garantice que todas las opciones requieran que los alumnos se hayan estudiado todo el temario.

Finalmente, cada examen seguirá teniendo una duración de hora y media aunque inicialmente se planteó alargarlos a una hora y tres cuartos. Entre los objetivos de esta reforma también está el de homogeneizar los exámenes en todo el país, respetando las competencias de las comunidades autónomas.