La Feria del Libro supone hasta un 20% de la facturación anual de las librerías

La Feria del Libro es un momento de esparcimiento y disfrute para los lectores, que aprovechan para pasear por zonas verdes, como el Parque Grande José Antonio Labordeta de Zaragoza, donde se celebra esta cita hasta el 11 de junio. La muestra es también una fecha importante para el sector, que estos días multiplica su trabajo, llegando a facturar hasta el 20% de su recaudación anual. 

Las casetas son un gran expositor para las librerías y editoriales, como señala el presidente de la Comisión Permanente del Libro de Zaragoza, César Muñío: "Es un esfuerzo estar aquí toda esta semana, pero en lo que estamos todos de acuerdo es que hay que estar aquí y que nos tiene que ver el público. Tiene que saber que existimos y que estamos a pie de calle los 365 días del año".

La repercusión económica de la feria está demostrada. Para cada expositor supone un número de ventas, pero la mayoría coincide en que es un momento esencial para darse a conocer y atraer a nuevos lectores y compradores. "En Madrid, hay expositores que llegan a hacer el 20% de su facturación anual en estos 17 días. No les ocurre a todos, pero les ocurre a muchos. Es un empujón sin duda", comenta Eva Orué, directora de la Feria del Libro de Madrid.

Luz Gabás firmando libros en Zaragoza. 

Más allá de los libreros, los escritores también saborean las mieles de la feria y el contacto con las personas que hacen que puedan cumplir su sueño de llenar páginas. Para la autora aragonesa Luz Gabás, que firma estos días en Zaragoza, estos encuentros pueden marcar la obra del escritor: "A veces, cuando estás un poco abatido, llega una persona y te cuenta algo de su experiencia vital relacionada con la lectura de uno de tus libros y te pide por favor que sigas escribiendo. Y cuando estás otra vez sola en casa, te acuerdas de esas palabras y sigues adelante".

Además, este año, las ferias de Zaragoza y Madrid se han unido para celebrar de forma conjunta la cita sin que las distancia sea un problema para favorecer la lectura.